Que muchos suecos veraneen en nuestro país buscando sol y calor es una evidencia, pero aunque su verano es muy suave, con máximas de entre 12 y 18 en el sur (nada de hablar del norte, donde nieva hasta en verano) también disfrutan de lo que para ellos son temperaturas de verano en sus "casas de vacaciones".
Ésta, en concreto, se encuentra en Blekinge, una provincia al sur de Suecia y no me puede gustar más.
Como os conté en uno de nuestros cafés, el rojo es uno de mis colores favoritos para el exterior, así que esta casa pintada en ese color me parece perfecta, un color fuerte, alegre, ideal para combinar con el verde de la vegetación.
Tampoco el interior defrauda. Sobre un blanco casi absoluto, la luz invade todas las estancias gracias a unos enormes ventales, decoración nórdica básica, textiles ligeros y veraniegos, fibras naturales... un ambiente fresco para una casa de vacaciones perfecta.
Fuente: este post proviene de Deco con Sailo, donde puedes consultar el contenido original.
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