Los desmontamos con cuidado, y limpiamos el metal con la ayuda de lana de acero. Ya lo hemos comentado en otras ocasiones, la lana de acero es uno de los mejores inventos que existen para limpiar metales. Siempre fina, para no rallar, usada con guantes, para no clavarnos ninguna hebra, y con mascarilla si vais a usarla en interior, que no es bueno aspirar el polvo de acero.
Por eso nosotras procuramos salir a la calle siempre que tenemos que usarla.
¿Veis la diferencia? ¡Es mano de santo!
Barniz para metales..., una manita para conservarlos limpios por más tiempo.
Y entre el cartón y la tela, una lamina de muletón. Originalmente llevaban una capa de gomaespuma, pero no hemos querido repetir con ese material, pues con el tiempo se termina convirtiendo en polvo, y ya no cumple la función de mullir la imagen.
Lo dicho; sólo hemos recuperado su belleza original, y esta vez con un propósito muy especial...,
... hacerlas llegar a tres de nuestras amigas blogueras, Concha, Isabel y María José.
El jueves pasado tuvimos un encuentro entrañable y muy deseado con las tres. Llevábamos tiempo intentando "cuadrar las agendas" y por fín llegó el momento. Isabel era la única que no conocíamos personalmente. Su blog Alromasar es una constante muestra de su habilidad, su meticulosidad y su buen hacer. En él podéis encontrar manualidades de todo tipo con su sello indiscutible de calidad. Merece la pena paseís a verlo, aunque nos consta que la mayoría ya lo hacéis. ¡Mirad qué monería de cajas nos hizo para esta cita!
María José fue la primera que conocimos, de ésto hace ya un año. Su blog El inventario de MJ es un diario de a bordo de sus trabajos y manualidades, que aborda con valentía y entrega. Cariñosa y detallista, nos hizo un regalo que nos llegó al corazón. Fue rescatando fotos de nuestros trabajos, publicadas en el blog, y las pasó a servilletas para decoupage. Con ellas decoró un par de preciosas bandejas de cristal. ¡Otro precioso obsequio para Retro!
¿Y qué decir de Concha? Con ella congeniamos desde el minuto uno, pues su vitalidad y optimismo se contagian de manera inmediata (y eso a nosotras nos viene de perillas, jeje). Buscadora incansable de tesoros decorativos, su Blog de una cazachollos sigue su particular y original rumbo, sin competencia alguna. Ella fue la última en concretar el encuentro, por una ligera indisposición, pero nos encantó que, finalmente, pudiera solventarla para acudir a la cita.
¡¡Estamos felices y deseosas de una nueva quedada!!