Buenos días, moría de ganas de mostraros la segunda parte de mi habitación de invitados. Como os comente hace unas semanas, tenía muchísimas ganas de terminar este cuarto y dejarlo bonito para cuando nuestra familia y amigos suben de Valencia.
Justo cuando estábamos dando vueltas al cabecero, surgió la posibilidad de colaborar con la empresa Lokoloko.es. Echamos un vistazo a la web y nos gustó muchísimo la infinidad de vinilos que tienen.
Por supuesto, todos de gran calidad (sirven para pared, forrar muebles, efecto azulejo) y realizados con tintas ecológicas, un asunto que cada vez tendríamos que tener más en cuenta. En este caso, están colocados en el dormitorio, pero al ser lavables (con agua y jabón) se pueden poner en cocinas y baños sin problemas.
Aquí os dejo el catálogo producto completo para que ver diseños, composiciones e ideas. En mi caso, yo os voy a dejar el paso a paso de cómo montamos el cabecero de la cama. Es cierto que la calidad del vinilo es muy alta y podríamos pegar directamente en la pared, pero al ser un piso de alquiler es mejor buscar soluciones low cost que luego nos podamos llevar a otro sitio sin mucho lío.
Aunque había infinidad de colores y dibujos, ya conocéis mi cuelgue con los tonos pastel, así que el rosa desde el minuto cero me pareció la mejor elección. ¡Echad un vistazo al DIY completo!
MATERIALES
Como os he comentado es un DIY muy básico. Solo tenemos que marcar la altura del cabecero, pegar con cola blanca y fijar con tornillos para hacer la estructura más estable. Por último, pegamos el vinilo y colocamos en la cama.
RESULTADO FINAL
Fotos Inés Torres