Los mismos tonos tostados unen esta cálida estancia dividida en salón, cocina y comedor, además de una zona de tertulia junto a un gran mirador. Sutiles azules fluyen por todo el espacio creando un entorno del que emana serenidad. Una integración de color acertada a la que se unen algunos elementos de madera. Sólo los difererentes artesonados en los techos dividen las distintas estancias. Un enorme espacio donde confluyen diferentes zonas en total armonía.
Vía: House of turquoise