Si tienes una casa o un estudio de menos de 50 m2, ¡has llegado al lugar indicado! Desde Conforama queremos darte unos trucos para que tu casa gane espacio visual y luminosidad y aproveches hasta el último rincón. No hay casas pequeñas, sino mal aprovechadas. ¡Sigue estos cinco puntos clave a la hora de amueblar y decorar tu minicasa!
1. Apuesta por la decoración simple
¡Menos es más! Es una frase que podremos leer cientos de veces en un post de decoración, pero es que es muy cierta, sobre todo cuando no tenemos mucho espacio. No es conveniente llenarlo de adornos y de muebles. Ahorra en decoración y pon solo lo justo y necesario. Con tener un par de objetos que aporten nuestro toque personal es suficiente, no necesitas cubrir absolutamente todas las paredes.Además, los colores también juegan un papel muy importante. Es mejor elegir tonos claros y neutros como el blanco, el beige o el gris. Aportan más luz y el espacio parecerá más despejado. Lo ideal es tener las paredes monocromáticas y los muebles en la misma gama de tonalidades para que se vea todo unificado. Le puedes dar el toque de color en una pequeña pieza decorativa o en los textiles, como por ejemplo en los cojines.
Otra gran ventaja de elegir un mobiliario neutro es que puedes cambiar la decoración de tu casa cuantas veces quieras, porque combina con cualquier estilo y color. Aquí puedes ver una selección de muebles con líneas sencillas donde predomina la madera y el color blanco. Todos ellos quedan genial con los dos estilos decorativos que se muestran como ejemplo. Puedes darle tanto un toque más moderno y tropical como otro un poco más clásico y marinero.
2. Sí a los muebles ligeros
Los colores son muy importantes, pero el diseño también lo es. Cuanto más sencillos sean los muebles, ¡mucho mejor! Aquellos con líneas rectas y que tienen aire con respecto al suelo, ocupan menos espacio visual y esto hace que el espacio parezca más grande.Esta máxima unida a la de los colores neutros, te ayudará a sacarle mucho más partido a tu hogar. Por ejemplo, en esta imagen se puede comprobar el efecto que tiene seguir estas dos recomendaciones. Se ve un espacio despejado, ideal para poner un pequeño comedor.
Cuando lo que necesitas es espacio de almacenaje porque tu casa es pequeña, puede parecer un poco contradictoria esta idea de los muebles ligeros. Lo ideal es combinar algunas piezas sencillas con otras que escondan espacio en su interior como algunos modelos de chaise longue con arcón de almacenaje o algunas mesitas de centro. Notarás un gran desahogo a la hora de guardar todo lo que necesitas. Adapta los muebles a tus necesidades y consigue una distribución armoniosa. Muebles ligeros sí, pero también con capacidad.
3. Encuentra la decoración más versátil
Cuando faltan metros cuadrados, nada mejor que los muebles multifunción. Puedes darle dos o más usos y ocupar el espacio de uno. Por ejemplo, en la imagen puedes ver un escalón de madera que también puede ser un asiento extra o una mesita auxiliar. Otro ejemplo es el clásico sofá cama. ¿No tienes habitación de invitados? Improvisa una en el salón con esta idea. Si la habitación es muy pequeña, opta por una cama abatible sobre el escritorio o una litera con armario incluido.Otra opción que no podemos pasar por alto son los muebles plegables o extensibles. No renuncies a invitar a la familia o a tus amigos a casa. Elige un mesa que se pueda hacer más grande y ten preparadas sillas plegables en cualquier rincón. Ocupan poco y dan mucho servicio.
Cuando hablamos de versatilidad, no solo nos referimos a los muebles, sino que también hablamos de las estancias. Las casas parecen más grandes cuantas menos paredes y puertas haya. El concepto de espacio abierto es muy utilizado en casas pequeñas donde en un mismo espacio se recrean diferentes estancias bien diferenciadas. Por ejemplo, es muy común unir el salón y la cocina o el salón y el despacho. En lugar de tener varias habitaciones pequeñas, es preferible tener una mucho más grande.
4. La iluminación es un factor principal
Cuanta más luz natural, mejor. La estructura de la casa no es algo que podamos cambiar a nuestro antojo, por lo que la cantidad de luz dependerá de la orientación y del número de ventanas. ¿Qué puedes hacer para aprovechar al máximo el sol? Lo primero a tener en cuenta son las cortinas o los estores. Estos deben ser lo más traslúcidos posible, con tejidos ligeros y colores claros para que dejen traspasar más luz. En algunos casos, incluso prescinden de ellas.Volviendo a los colores de las paredes, otro motivo más para que sean blancas o de algún tono claro es porque la luz rebota en ellas y aporta más luminosidad a la estancia. En este dormitorio lo podrás apreciar.
Otra idea para llenar de luz tu casa son los espejos que reflejan tanto la natural como la artificial. Esta última también nos puede ayudar a conseguir efectos ópticos como ensanchar pasillos, potenciar un rincón y ocultar otros. La luz fría nos ayuda a ampliar el espacio, aunque siempre necesitamos algún toque de luz cálida para hacerlo más acogedor. Consigue esa luz ambiente con diferentes puntos de luz, incluso añadida en los propios muebles.
5. Despliega tu creatividad
Además de cumplir todo lo anterior, para aprovechar bien una casa pequeña necesitas poner en práctica todas tus habilidades decorativas. Cada casa es diferente y tiene sus propias soluciones de espacio. Para llenarte de inspiración, te dejamos estas cuatro minicasas de las que podrás sacar más de una idea. ¡Toma nota!¡Pequeñas pero bien aprovechadas! Así son estas casas y así puede ser la tuya. No lo pienses más y visita Conforama para llevar a cabo todas estas ideas y disfrutar al máximo de tu pequeña y confortable casa.