(Please scroll down for English)
¿No os pasa a veces que no valoráis algo hasta que lo habéis perdido definitivamente? Por ejemplo, aquel par de botas que te encantaban e ibas comodísima, las habías guardado durante siglos porque no querías tirarlas, pero ya no te las ponías porque les entraba agua… Las tiras a la basura y justo dos meses después de tirarlas, descubres que existen unos calcetines impermeables que te podían haber solucionado el problema…
Con los muebles pasa algo parecido. Existe la teoría de que, si te gusta un mueble u objeto de decoración por su forma, puedes actualizarlo con un poco de pintura: la base de una lámpara de pie, un jarrón, el marco de un cuadro o de un espejo… No me refiero a destrozar una antigüedad pintándola, obviamente, pero sí a pintar muebles “viejunos”… y de esos hay muchos -por suerte o por desgracia- en los pisos de alquiler y venta.
Como algunos ya sabréis por mi presentación, trabajo en RE/MAX y, cuando me toca dar mi parte de la formación a nuevos agentes, les pido que aprendan a encontrar “la dignidad” en cada propiedad a la hora de hacer las fotos. Es importante visualizar los cambios sencillos que se podrían aplicar a una estancia para maximizarla, y para eso necesitamos una mente flexible y mucha atención al detalle. De esta forma aportamos un valor añadido a nuestros clientes al asesorarlos -entre otras muchas cosas- también en home staging.
Esta silla de piso de alquiler tenía una forma divina que me encantaba, patas tipo chippendale y un respaldo de madera precioso, y como en mi anterior transformación de sillas me había ido a algo más neutros, ahora me apetecía algo más rompedor.
Buscando telas me topé con esta en color verde lima y plata y no me lo pensé más: usé un color plata para pintar toda la madera y este es el resultado. ¿No creeis que mereció la pena?
Hasta pronto,
Laura
Classical chair updating
Have you ever disregarded something for ages, only to deeply miss it after having lost it forever? Say your favourite pair of boots, you kept them for years even if you couldn’t wear them anymore because whenever it rained your feet would get wet… Finally you make up your mind and throw them away… only to find out -just a couple of months later- that waterproof socks existed…
Something similar happens with furniture. If you like the shape of an item, try to picture what it’d look like with a coat of paint: a lampbase, a vase, a mirror or picture frame… I’m not talking about destroying an antique, but about giving an ugly, wrong-kind-of-old piece a new look.
As you may know from my introduction, I work at RE/MAX, and whenever I have to train new estate agents I always try to encourage them to make the best out of a property, to find its “dignity” by visualizing some simple changes that could make a room look much nicer. You need a flexible mind and some attention to detail. That’s what home staging is about.
I loved the shape of this chair. My previous chair transformation was quite a neutral one, so I felt like risking with something more contemporary. Looking for a nice piece of fabric I came across this one in lime green and silver and I didn’t hesitate: I painted the wood silver and this is the result, what do you reckon?
See you soon,
Laura