Los dueños de esta casa de muñecas real son dos chicos jóvenes que viven en Toronto, Canadá. Afirman que les encanta el mundo infantil, los juguetes, los caramelos y la estética vintage y muy femenina. Con toda esta mezcla, han creado una casa con estilo propio y a la que no le falta detalle.
En mi opinión, se podría parecer más a un "museo" que a un hogar real en el que vivir. Resulta un tanto agobiante ver tantos objetos por todos lados, aunque la verdad que fijándonos bien en los detalles, hay cosas verdaderamente geniales y muy chic.
Guste o no, no podemos negar que es una casa muy original, y que tiene un estilo único que la verdad que hacen que sea una casa para enseñar.
¿Qué os parece?