1. Un rincón bien iluminado es primordial. Además de comprar un flexo, debemos poner el escritorio cerca de la ventana para poder aprovechar al máximo la luz solar. Es importante evitar que la luz haga sombras en los libros o cuadernos.
2. La postura del niño mientras hace tareas es importante para evitar dolores de espalda futuros, una buena silla hace parte de este trabajo.
3. Si queremos mantener una sensación de orden en el rincón de estudio lo más práctico es poner cajoneras o muebles cerrados donde se pueda guardar todo sin ningún problema. Así no tendremos bolis, cuadernos o libros a la vista.
4. Para evitar distracciones lo mejor es poner el escritorio en una zona donde esté tranquilo y con poco ruido. Es decir, de poco nos sirve rodear el escritorio de juguetes si queremos que esté pendiente de los libros.
5. Por último, podemos poner un tablón de corcho o pintar nosotros mismos una pizarra donde apuntar las tareas pendientes, poner algún mensaje de ánimo...
¿Nos dejáis ver donde estudian vuestros hijos?