Cuando decidiste comprar tu vivienda, uno de los requisitos indispensables era que tuviese jardín.
Buscaste y comparaste muchas ofertas durante meses, buscando no solo la casa de tus sueños, sino también ese terreno de ensueño en el que disfrutar del Sol y de las buenas temperaturas.
Y, por fin, la encontraste. Una maravillosa casa de campo en las afueras, en medio de un paraje natural y con mucha tranquilidad.
La vivienda en sí es estupenda y el jardín tiene todo lo que buscabas: piscina, cenador, barbacoa de obra, césped natural y una zona para plantar flores.
Durante el primer verano, aprovechaste al máximo las ventajas que te ofrecía tu jardín. Sin embargo, cuando llegó el frío empezaste a descuidarlo; el césped no se cortaba, las flores se secaban y los muebles de jardín se estropeaban a la intemperie.
Ya ha pasado un tiempo y cuando te asomas por la ventana, solo ves un terreno desolado.
¿Qué ha sido de toda la ilusión que tenías en un principio? Es una pena que, teniendo un lugar con tantas posibilidades, no le estés sacando el partido que se merece.
Seguro que piensas que renovar el jardín requiere una inversión importante, lo cual es un gasto que no estás dispuesto a asumir. Pero no solo eso, sino que además el mantenimiento también supone un desembolso mensual.
Todo eso es cierto, pero también hay otras alternativas que, además de ser económicas y de necesitar muy poco mantenimiento, también son respetuosas con el medio ambiente.
¿No te lo crees? Pues sí, hay otras formas de hacer de tu jardín un lugar en el que todos quieran estar. Y no estamos hablando de césped y piscinas infinitas, sino de la decoración con piedras naturales.
Cómo decorar el jardín con piedras naturales
Las piedras naturales no solo se utilizan para la construcción de superficies y viviendas, sino que también se usan en la decoración de parques, jardines y zonas urbanas.
Debido a su amplia gama de colores y texturas, se adaptan muy bien a todo tipo de estilos y proporcionan un aspecto elegante y sencillo.
En Trucos de hogar caseros siempre buscamos ayudarte, así que te dejamos algunas ideas para decorar tu jardín utilizando piedras naturales.
Triturados para un jardín zen
Seguro que más de una vez te has fijado en los jardines de inspiración japonesa. Son jardines sencillos que combinan vegetación, rocas y agua, lo que crea un lugar que da paz y serenidad.
En estos lugares destacan unas zonas de roca triturada de color blanco con motivos lineales. Son los conocidos como jardines zen, utilizados por los monjes budistas para la meditación.
Hacer tu propio jardín zen es muy sencillo: simplemente hazte con una bolsa de piedra triturada, elige una zona del jardín y cúbrela con una capa generosa del triturado.
Añade algunas rocas más grandes e, incluso, delimita la zona con cantos rodados. Ahora solo te falta un rastrillo de madera para dibujar patrones en tu jardín. De esta forma, tendrás una zona especial para relajarte y evadirte del mundo.
A veces, pasear por el jardín puede resultar un poco complicado. Todo el terreno está cubierto de césped fresco y muy bien cuidado, así que hacemos todo lo posible para no pisarlo.
La mejor forma para marcar el camino y evitar que el césped se estropee se centra en colocar unas losas de cuarcita.
Para ello, define el camino que quieres hacer; de la entrada a la puerta principal, de la puerta de atrás a la piscina… las combinaciones son muchas.
Después, retira un poco de césped y coloca la cuarcita, ajustándola muy bien para que quede enterrada en la tierra y no se mueva.
Puedes combinar la cuarcita formando un camino definido o, simplemente, poner losas separadas como si fuesen unas piedras para cruzar un río. Ahora nadie se perderá y tu jardín tendrá mucho mejor aspecto.
Grava para hacer motivos
¿Te has fijado cómo en muchos parques y rotondas usan grava para hacer dibujos? Combinando grava de distintos colores se pueden hacer motivos geométricos, letras o delimitar las zonas del jardín.
A la hora de comprar grava para jardín, encontrarás muchos colores y espesores. Usa tu imaginación y rodea la fuente con anillos de varios colores, haz franjas en la zona de la entrada o mezcla grava de distintos colores para crear un efecto diferente.
Con la grava tu jardín no solo mejorará a nivel visual, sino que protegerás la tierra descubierta de la erosión y evitarás que crezcan malas hierbas.
Comprar piedras para jardín es una opción natural y al alcance todos los bolsillos. Este tipo de productos apenas necesita mantenimiento, son muy versátiles y puedes usarlos tú mismo, sin necesidad de mano de obra especializada (eso sí, hazte con unos buenos guantes y unas gafas de seguridad). Aprovecha estas Navidades y reinventa tu jardín usando piedra natural.
¿Qué opinas sobre estos consejos para renovar el jardín con piedras naturales?
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