Realizar decoraciones con plantas puede ser una muy buena opción para darle un toque fresco a tu hogar.
Así, hoy vamos a ver tres opciones distintas para realizar las más lindas decoraciones con platas:
1. Crear centros de mesa. Un bonito centro es la solución decorativa ideal para la mesa del comedor. Así, para crearlo no hacer falta rebuscar mucho, tan solo debemos combinar bien los elementos adecuados. Por ejemplo, podemos recoger unas cuantas flores silvestres en un paseo por el campo (recordad, es mejor recogerlas por la tarde, cuando hay menos humedad, y siempre haciendo un corte limpio). Después, las dejaremos secar durante un tiempo (en torno a dos-cuatro semanas), colgándolas boca abajo en un sitio oscuro y aireado. Una vez secas, echaremos laca para protegerlas. Además, podemos rociarlas con algún perfume para que den olor.
Después, tan solo tendremos que colocarlas en un jarrón, o recortar los tallos y ponerlas sobre una bandeja, una caja... Podemos acompañarlas también de velas, piñas, castañas...
2. Originales terrarios. Los mini terrarios son una clara tendencia. Se trata de crear pequeños jardines en miniatura, ¡y puede ser en cualquier sitio! La mejor prueba de ello es esta idea, que consiste en elaborar un mini jardín en el interior de una jarra de café. Así, para hacerlo tendremos que empezar poniendo una base sólida de arena, piedras... de unos 2,5 cm de grosor. También debemos poner carbón activado para mantener la tierra fresca.
Una vez tenemos la base lista, comenzaremos a añadir las plantas y demás elementos: musgo, cactus, suculentas...
3. ¿Practicamos el ikebana? El ikebana es un arte japonés que consiste en la elaboración de centros florales decorativos. Está tratado también como una especie de práctica de meditación, en la que importan tanto los elementos como la manipulación de los mismos. Así, podemos escoger entre los arreglos verticales y los horizontales, aunque en cualquier caso necesitaremos: un soporte llano, alambre para la estructura y ramas, flores, hojas...
Lo más importante para el ikebana es la naturaleza, y la composición suele basarse en un triángulo, cuyos ángulos representan tres elementos: cielo, tierra y hombre. Así, a la hora de crear nuestro arreglo buscaremos siempre la sensillez, creando formas abiertas y angulares.
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