Disponer de un jardín, aunque sea pequeño, es un gran privilegio, sobre todo si puedes decorarlo a tu gusto e imprimir tu personalidad en cada rincón. En este espacio de tamaño reducido se puede crear un ambiente en el que relajarse y disfrutar del buen tiempo al aire libre.
Para conseguir una bonita decoración no es necesario tener un presupuesto alto, ya que se pueden encontrar productos de jardín a un precio económico. Si quieres algunas recomendaciones para conseguir un jardín funcional y bonito en pocos pasos sigue nuestros consejos.
¿Cómo decorar un jardín pequeño?
Seguro que siempre has soñado con tener un gran jardín en tu casa en el que disfrutar de una piscina enorme, barbacoa, una zona de relax, árboles, plantas e incluso una fuente, sin embargo, poder disponer de un espacio de grandes proporciones es bastante complicado. En el caso de tengas un jardín con unas dimensiones menores a lo que te gustaría, no te preocupes, porque con la distribución y decoración adecuada podrás sacarle mucho partido.Tan solo necesitas un poco de imaginación e ideas que te inspiren, y para ayudarte vamos a darte algunas nociones con las que conseguir el jardín de tus sueños.
Aprovecha el espacio
En un jardín pequeño es importante ocupar el máximo espacio, incluso las esquinas, pero si no quieres colocar plantas en esa parte del jardín, la mejor opción es que añadas algunos muebles como sillones, tumbonas o un banco de madera.Para aprovechar todos los metros del jardín sin recargarlo, busca elementos que se puedan guardar fácilmente, como puede ser una hamaca colgante, que es fácil de quitar y poner.
Aunque quieras utilizar al máximo el jardín, debes tener claro que a veces menos, es más. Por lo que si colocas demasiados muebles puede dar una sensación de agobio. Intenta ocupar los laterales y dejar un espacio central vacío.
Instala una mesa con sillas
Si quieres aprovechar al máximo tu jardín y poder comer, leer o realizar algunas actividades, lo mejor es colocar una pequeña mesa y un par de sillas que te permitan hacerlo. Busca un modelo de mesa y sillas especiales para exterior, ya que deben estar realizadas con materiales que resistan los cambios de temperatura y la acción directa, tanto de la lluvia, como de la nieve y de los rayos solares. Así te garantizas su durabilidad y que puedas usarlos año tras año sin deteriorarse.Si eliges mesas y sillas plegables ganarás movilidad en el caso de que lo necesites, además, eso te facilitará las tareas de limpieza y riego en el jardín y no supondrá un obstáculo.
Delimita los espacios
Puede que creas que es muy complicado separar espacios por el tamaño reducido del jardín, pero podrás crearlo con poco esfuerzo y un poco de imaginación, además te servirá para que visualmente parezca más grande de lo que es.Por un lado puedes crear una zona de descanso, donde colocar la mesa y las sillas o una tumbona. Por otro lado, busca un lugar donde colocar el césped, es muy agradable caminar sin calzado por el césped fresco y recién cortado. En el caso de que no te guste el césped, puedes cambiarlo por gravilla o pavimento como por ejemplo unas losas que, además, ayudarán a delimitar mejor los diferentes ambientes.
Una fuente como protagonista
Una fuente siempre es un elemento decorativo que le da un toque muy especial a cualquier jardín, aporta frescura y el sonido del agua contribuye a relajarnos y a sentirnos más cómodos. Aunque tengas un jardín pequeño, eso no es un obstáculo para instalar una fuente, pero en este caso, en lugar de colocarla en el centro del jardín, lo que podría dar un aspecto recargado, lo mejor es que la pongas en una pared, así no robará espacio. Hay fuentes de diseños muy diferentes, por lo que seguro que encuentras una que se adapte al estilo del jardín y a tu presupuesto.Jardines verticales
Los jardines verticales llaman mucho la atención y son una forma perfecta de aprovechar el espacio usando las paredes o soportes que se colocan en el techo. Para conseguir un jardín vertical puedes utilizan diferentes elementos como vigas o estantes de madera que se colocan en la pared y colocar plantas en ellas. Otra forma de hacerlo es con plantas enredaderas que van creciendo y adaptándose al espacio. Además, suelen desarrollarse con rapidez, por lo que no tendrás esperar mucho para ver cómo colonizan tu jardín y lo inundan de color, en poco tiempo podrás presumir de vegetación.También puedes usar los propios muros o vallas que delimitan tu jardín con plantas trepadoras que conseguirán que tengas una pared llena de flores como la buganvilla o el jazmín. El efecto visual será el de estar en plena naturaleza y no requiere un gran desembolso económico.