Yo pensaba que esto era ficción pero no… tengo una amiga que también tiene a sus amigos como vecinos en la puerta de enfrente …y a los protagonistas de este post ¡les pasa lo mismo!.
Al final lo de vivir en el mismo edificio que tus amigos va a ser más común de lo que yo pensaba…
Os presento un apartamento de 88 metros cuadrados que está por encima del resto de los edificios de la zona, con lo que la luz es la gran protagonista al igual que la madera, ya veréis que es un material que tiene gran presencia en la casa.
La decoración de este piso danés dista un poco del estilo nórdico que tanto estamos acostumbrados a ver, ésta es una mezcla de muebles de segunda mano de la década de los 60, piezas decorativas de los años 50 y piezas de diseñadores actuales.
Su dueña, Mette Hagedorn, diseñadora para la marca Base212 entre otras cosas, utiliza su propia casa como “laboratorio de interiores”, prueba nuevas ideas, materiales, combinaciones de colores… así ha conseguido una decoración muy personal.
A ver que os parece.
Una pieza muy llamativa es la mesa de comedor que tiene, hecha con tablones unidos con una cinta… quien no tiene una mesa en su comedor es porque no quiere… y más después de ver ésta, ¿qué no?.
La cocina mezcla madera natural con muebles en negro y detalles en celeste, ya os habréis fijado lo mucho que gusta a los nórdicos un rombo, ¿no?
La habitación y la entrada de la casa sencillas y funcionales.
Fuente: Alt for damerne, Sin pecado concebida
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