Cuando a comienzos del verano, la productora de televisión Contubernio
se puso en contacto conmigo para preguntarme si estaba interesada en
seleccionar mobiliario con que decorar la suite de hotel de uno de los
decorados de su serie La que se avecina, me quedé realmente
sorprendida.
Les contesté que Hampton SC era un blog, no una tienda online ni una
empresa de alquiler de atrezzo o mobiliario.
Ellos me contestaron que algunos muebles que aparecían en ciertos post
de mi blog resultarían idóneos y pensé que la experiencia podía resultar
enriquecedora y divertida.
Pregunté a mi hermana Gema qué le parecía a ella la idea puesto
que casi todas las piezas por las que se habían interesado eran
de su casa. Sorprendida y halagada me contestó que adelante y
decidimos hacer partícipe del proyecto a nuestra común amiga
Esther López-Barranco con la que llevábamos tiempo pensando
crear una empresa dedicada a la decoración y organización
de espacios y eventos.
Así surgió nuestro emprendimiento Estoy contigo en..., del que
os presenté inicialmente el segundo de nuestros trabajos, un
photocall para [h]arina y hace unos días uno de los últimos,
una mesa para la cena de Acción de Gracias.
Mostraros nuestro proyecto de decoración de una suite de hotel de lujo
para la serie La que se avecina debía esperar a que el capítulo se
emitiese y fue el lunes de la semana pasada cuando se estrenó.
Estuvimos atentas a la emisión del capítulo 101 de la serie en
el que la Cuqui sigue haciendo de las suyas en una supuesta
habitación del hotel Palace decorada en azul y blanco.
Las mesitas de noche inglesas antiguas, las lámparas/tibor sobre
las mismas, los cuadros en la pared principal y sobre el escritorio,
el antiguo canapé corbeille estilo Luis XV, el sillón Luis XVI,
la descalzadora vintage recuperada...
Una selección de fantásticas piezas para conseguir el ambiente
elegante y sofisticado que nos habían encargado.
Y en los títulos de crédito el logo de Hampton SC pues apenas
tuvimos tiempo para preparar el de Estoy contigo en...
Quedamos tan satisfechas con la experiencia que en cuanto
terminamos ya estábamos deseosas de emprender un nuevo
encargo y el siguiente y el siguiente...
Pocas cosas hay tan motivadoras como trabajar en aquello que a
uno le apasiona y sentir ese subidón de adrenalina cuando acaba
un proyecto que ha gustado y que compensa el esfuerzo,
los nervios o el estrés de los plazos.