Las hay de diferentes formas, algunas muy divertidas. En este caso se utiliza un vinilo que se pega en la pared, tiene la propiedad de poder escribir encima.
Combina perfectamente con el resto de elementos de su habitación y con cualquier tipo de decoración.
Fuera de la zona de juegos, la pizarra ha ganado terreno en la cocina, se puede utilizar como recordatorio, para escribir la lista de la compra o como simple recurso decorativo. Naturalmente existen pinturas especiales cuando se utiliza en una pared, por ejemplo esta que os dejo aquí, fácil de localizar en cualquier centro comercial de Bricolage.
Ideal para hacer unos dibujitos o dejar un mensaje simpático...
La puerta de un armario puede ser un lugar perfecto para colocar una pizarra.
Hoy día se pueden encontrar también detalles divertidos como estos para la nevera.
Si no os atrevéis con toda una pared, quedan muy bien estos pizarrones apoyados simplemente en una pared.
Algunas decoraciones más arriesgadas trasladan la pizarra al resto de la casa.
O en rincones muy concretos.
Y que me decís de este original aseo??
Para terminar una alternativa, la pizarra esta imantada y se pueden enganchar cosas en ella.