Aquí se puede apreciar el detalle de los dos tonos en la pintura.
Se han diferenciado varias zonas.
El sofá lo he retapizado yo misma, un trabajo que no recomiendo porque es muy laborioso, aun así, creo que ha quedado muy bien.
El papel de la pared se ha utilizado en dos de ellas, pero sólo en la mitad para no recargarlo en exceso, el resultado es acogedor..
He tapizado también las sillas para que combine con el resto de elementos.
La mesa es antigua de roble, las patas en blanco envejecido le dan un aire renovado.
El mueble del salón pintado en dos tonos, pino y blanco envejecido.
Desde otro ángulo.
Al igual que en el pasillo he colocado uno espejo en forma de triangulo para resaltar la zona.
Las cortinas se han retirado del ventanal y para dejar pasar la luz natural se han instalado papel al ácido. Lo que ha aportado mucha mayor luminosidad.
Espero os haya aportado ideas.
Gracias por la visita.