¿Y si le damos a nuestro hogar un aire más primaveral? ¿Como? Sin duda, las plantas, son el aliado perfecto para aportar un cambio fresco y natural sin gastarse mucho dinero.
Ya te he contado en alguna ocasión mi nula capacidad para cuidar de las plantas, y aunque no quiero resignarme y dar el asunto por perdido, he encontrado la solución. Una solución sencilla y totalmente de actualidad... el eucalipto.
Hoy te enseño 5 formas más que sencillas para decorar con esta planta tan versátil.
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Su uso más característico es como acompañamiento a un ramo de flores. Adorna, complementa y da ese toque verde tan bonito que llevan los ramos.
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Si quieres que el eucalipto sea el protagonista indiscutible de la estancia, hazte con un gran ramo, aportarás frescura y naturalidad. Quedan preciosos con las ramas frescas, recién compradas en cualquier floristería. Un truquillo para que duren más tiempo y conserven el color verde y ese olor tan característico, no tienes más que rociarlas un par de veces a la semana con un poquito de laca para el pelo.
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Si por el contrario sólo quieres aportar un toque verde opta entonces por unas pocas ramas, darán un toque sobrio pero muy elegante. Lo mejor es secar esas ramas, para ello rocialas igualmente con laca para el pelo, algo más que en el caso anterior, y cuelgalas boca abajo en un lugar seco y oscuro. El color verde se volverá mas intenso y las hojas más lisas. Cuando así sea ya estarán listas para decorar.
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Pero no siempre tienen que disponerse en jarrones, porque si lo que quieres es decorar una pared, existen formas muy originales de hacerlo, como estas dos que te enseño, muy sencillas pero tremendamente resultonas.
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Si te gusta el estilo romántico haz una corona con las ramas de eucalipto. Crearás un complemento ideal para decorar una pared, una lámpara, un centro de mesa y así ambientar cualquier fiesta o evento.
¿Te gusta el eucalipto? ¿Con qué opción te quedas?