Me encanta descubrir que algunas cosas pueden servir para múltiples usos. En este caso el elegido es el modelo Räskog de Ikea. Una monada de frutero de un estilo vintage en metálico y muy resistente. Los puedes encontrar tanto en color blanco, negro o su última novedad el color azul oscuro, además gracias a sus cuatro ruedas puedes moverlo fácilmente para limpiar. Me encantó porque es de dimensiones pequeñas y encaja en espacios pequeños como en mi caso.
Tengo ganas de ponérselo en la habitación, cuando así sea ya os lo enseñare. ¿Qué os parece? Espero que os haya servido de inspiración, nos vemos en el próximo post.
¡Feliz miércoles!