De vez en cuando se me va un poco la castaña y me gusta preparar chorradas o pequeñas sorpresillas para Valentina. Le digo que le he preparado una caja con una sorpresa y me quedo con la cámara esperando a ver cómo reacciona. Así que hoy voy a compartir con vosotros la última que le hice justo antes de irnos a hacer la siesta (sí, muy poco correcto por mi parte esto de subir revoluciones cuando justamente quieres bajarlas).
Tengo por encima del taller todo de materiales e ideas para la fiesta del segundo cumpleaños de Valentina y también cosillas que me quiero llevar para celebrar la Navidad y el año nuevo en Nueva York, así que se me ocurrió ponerle en la caja las historias que estoy haciendo a modo de photocall, a ver qué se le ocurría.
La verdad es que al principio se quedó muy sorprendida, y empezó a darle besitos a las cosas, hasta que el amore le dijo que era para ponérselo en la cara y hacerse fotos en nochevieja. Así, con el look pijamero, quedaba de lo más chic no créeis? Ya sabéis que yo soy flower power fan número 1, así es que el atuendo me parecía de lo más acertado.
Estas Navidades van a ser especiales, las primeras que yo creo que Valentina va a vivir más conscientemente, y además las vamos a pasar fuera, así que quiero que sean especiales. Quiero preparar 4 cosillas para hacer de las noches navideñas algo especiales aunque estemos a miles de quilómetros de casa. Incluso la noche de fin de año la vamos a pasar volando en el avión, nada chic la verdad, pasaremos el fin de año en pijama, así que estas cosillas van a hacer que el viaje sea un poco más especial.
Le contamos a Valentina que en unas semanas nos iríamos de vacaciones a una ciudad que está muy lejos y que tiene unos edificios muy altos, que haría mucho frío pero que lo pasaríamos en grande los 3. Yo no sé si se enteró demasiado pero parece que la noticia le gusto bastante ¿vosotros qué pensáis? Me imagino las noches de estas Navidades, van a ser muy distintas a las que hemos vivido hasta ahora: estaremos en un apartamento distinto, sin topas elegantes ni nada por el estilo. Seguramente Valentina lucirá ese pijama todas las noches y en vez de cenas multitudinarias en familia, viviremos unas navidades les 3, debajo de la cama, viendo pelis, mirando cuentos, y cantando nuestros propios villancicos.
Pijama de Valentina de Petit Bateau lo podéis encontrar aquí por 24,90
La calidad es buenísima, la tela súper gustosa y el estampado… qué os voy a contar yo, ¡si me vuelven loca las flores!