Hacía tiempo que tenía pendiente haceros un post “amb cara i ulls” como decimos por aquí, de la cocinita de exterior que tenemos en el pueblo. Siempre que llegamos, lo primero que hace Valentina es salir corriendo hacia el patio con las botas de agua puestas, y a la vez, siempre que os subo algún stories la avalancha de preguntas es tal que se merecía un buen post.
El juego simbólico que conlleva una cocina de exterior es rico en creatividad ya que aquello que se “cocina” siempre va de la mano de materiales naturales y desestructurados como hojas, arena, frutos, caracoles, palos… Así que de hecho, ¡podemos cocinar cualquier cosa!
La cocina de exterior está hecha de madera tratada para que pueda vivir sin problemas y soportar vientos y mareas. Es de un altura y tamaño ideal para que puedan jugar sin problemas varios niños. Algo que me preguntáis a menudo es a partir de qué edad la recomiendo. Tened presente que el tablero hace unos 70cm de altura (en las imágenes de Valentina os podéis hacer una idea), con lo que yo no la recomendaría para niños menores de 2 años y medio o tres. Además, es justo el momento en que el juego simbólico está en su gran apogeo y cuando realmente le van a dar más uso. Se trata de una gran apuesta, de algo duradero; así que sin duda puede ser una gran opción como regalos conjuntos, inauguraciones o espacios compartidos.
Las posibilidades de esta cocina son invitas. Tengo que reconocer que me encanta ver a Valentina jugar en ella y sobre todo las fotografías tan bonitas que se desprenden y como las estaciones dan el toque de color y condicionan el juego.
Esta cocina en concreto, y que podéis encontrar en Abitare Kids, también tiene un panel dividido en dos secciones: uno tipo ventanilla, en el que Valentina pasa todos los platos que va preparando como si de un restaurante se tratara; y la otra gran estrella: el cristal para pintar. Tengo que confesaros que en un primer momento no me hacía mucho “tilín” y no terminaba de cogerle el punto. Peeeero, como siempre, los hijos están ahí para enseñarnos que nos equivocamos. Os puedo asegurar que es una de las cosas que más le gusta hacer. Pintar en vertical y además en exterior y con transparencia es todo un acierto. La cocinita incluye unos pinceles dónde el mango guarda la pintura, de modo que una vez terminados se pueden volver a llenar. Para limpiar el cristal basta con un poco de agua y un paño, y ya os podéis imaginar quién está súper dispuesta para hacerlo ¿verdad?
Es por ello que también quería aprovechar para mostraros otro producto de la misma casa y que también podéis encontrar en Abitare Kids aquí, la pizarra de exterior.
Del mismo modo que la cocina, también incluye el móvil musical de bambú y la jardinera inferior. Además, con la cocina os viene todos los utensilios que podéis ver en la foto: las ollas, espátulas, cucharas, sartenes… todo de acero para que resista también los juegos de exterior.
Creo que no me dejo nada, cualquier duda que tengáis ya sabéis que me la podéis hacer llegar tanto por comentarios en este post como en Instagram. Sin duda son grandes recursos para potenciar el juego al aire libre, y sobre todo, ahora que parece que (al fin) empieza el buen tiempo.
Post patrocinado por Abitare Kids