En los últimos años, a la hora de arrancar una reforma, cada vez más gente se plantea tirar abajo los tabiques y conseguir un espacio más versátil. El presupuesto no es muy elevado y los resultados son impresionantes. Así, aunque siempre existen detractores que prefieren que la cocina esté más aislada, creemos que las opciones integradas tienen muchísimas ventajas.
¿Ventajas de integrar la cocina en el salón?
Si estás valorando cambiar la cocina por completo, hay tres ventajas que conseguirán que te decidas rápidamente. En primer lugar, vas a ganar en metros cuadrados, pudiendo tener un espacio más amplio para cocinar, una isla donde comer o armarios extras para mantener el orden. Al mismo tiempo, esta distribución consigue una mayor funcionalidad, al tener el comedor siempre a mano para recoger y poner la mesa.
La luz es otra de las razones de peso para dar este paso. Al tirar los muros comprobaremos cómo la luz natural fluye libremente y se aprovecha muchísimo mejor. Además, conseguiremos ambientes más acogedores usando lámparas de pie o apliques propios del salón.
Como tercera y última ventaja, si te gusta disfrutar de la comida en familia o tienes visitas con cierta regularidad, esta tipología de cocinas te permite cocinar y disfrutar de todo. Mientras se prepara la cena, puedes charlar y no sentirte aislado en una estancia aparte.
¡Cuidado con la elección de los colores!
Si has decidido integrar la cocina, debes ser muy cuidadoso con la elección de materiales y colores. Todo el espacio debe estar unificado y ser lo más armónico posible. Por ejemplo, los electrodomésticos panelados son la mejor idea para no ver la lavadora o el lavavajillas desde el sofá.
En este sentido, los tonos neutros son atemporales y nuestra mejor baza a la hora de dar sentido a toda la decoración. Elegir muebles blancos, grises, encimeras de madera y azulejos sencillos son un acierto seguro. Si queremos un toque de color, buscaremos algunos recursos como poner una lámina, pizarras, alfombras vinílicas o un mini huerto urbano de plantas aromáticas.
5 tips para integrar la cocina en el salón y mantener el orden
1. Es imprescindible buscar la continuidad en los revestimientos. Podemos elegir suelos laminados resistentes al agua y pintura plástica resistente a la humedad. Los azulejos quedarían reservados para fogones y zonas de agua.
2. Si no te decides a dar el paso de una reforma total, puedes dejar un muro a media altura y poner una mampara de cristal. Visualmente estarán unidas y no impedirás el paso de la luz. Otra opción es elegir una estructura de hierro y cristal para un toque más industrial.
3. Es importante siempre dar sensación de orden en la cocina. La primera regla es intentar que la encimera esté lo más despejada posible. Para ello, será muy útil elegir muebles de gaveta con mucha capacidad de almacenaje.
4. Otra herramienta muy útil a la hora de organizar son los carritos de cocina. Gracias a sus ruedas podemos moverlos libremente por toda la estancia. Además, son geniales para guardar menaje, paños de cocina, manteles o especias.
5. Las cajas y bandejas de madera serán otros de nuestros mejores aliados para mantener el orden. Por ejemplo, podemos ubicar una en la encimera para agrupar los utensilios que más usamos, el aceite y aquellos imprescindibles que siempre tenemos a mano para cocinar.