A la mayoría de las personas les gusta alojarse en una cabaña de madera cuando está de vacaciones, pero casi nadie elegiría vivir en una casa con paredes, pisos y techo de madera. Sin embargo, si se sabe combinar la madera, brinda incluso un aspecto moderno al hogar.
No sólo está cada vez más de moda la madera para los interiores de la casa, sino que además presenta varias ventajas. La madera crea un ambiente cálido y un clima sano, aunque el desafío está vivir en una casa con paredes de madera sin que parezca una cabaña de esquí.
La clave es encontrar el balance correcto entre grandes superficies de madera, los muebles y accesorios. Para contrarrestar la calidez de la madera se recomienda combinarla con materiales más fríos como piedra, cemento y vidrio. En el caso de una pared de madera de gran superficie, se recomienda combinarla con un piso de cemento gris oscuro.
Los grandes ventanales y el empleo de acero también generan un buen contraste. Si bien la madera brinda un aspecto rústico, se la puede redefinir combinando distintos tipos y mezclándola con diferentes materiales.
Para que las paredes de madera luzcan modernas, lo mejor es que el mobiliario sea reducido. Los muebles, a su vez, deberían ser sobrios y de líneas rectas. Esto no significa que uno deba renunciar a su señorial sillón o a una antigüedad. Bien combinados, conforman una buena mezcla.
El orden es importante. Deben evitarse los salones recargados y desordenados. Si se quiere vivir rodeado de madera, es importante saber elegir y agrupar. La madera necesita de espacio.
Tonos pasteles como el celeste claro, el menta y el verde, así como blanco y negro suman a este equilibrio, ya que le aportan liviandad al ambiente. Si éste se vuelve muy frío, se puede contrarrestar con paños, pieles y tejidos. De esta forma, el sillón retro volverá a verse confortable.
Los decoradores también recomiendan los marcos negros con fotografías en blanco y negro, así como floreros y lámparas modernas. Una casa con pared y piso de madera no necesita mucho más. La misma madera ya crea un ambiente cálido y agradable.
El efecto depende en gran medida del tipo de madera. Las maderas claras como el roble, el arce y el aliso son ideales para los interiores. También da un aspecto moderno el rough cut, es decir, las superficies menos pulidas. El mismo efecto puede lograrse con superficies de madera bien parejas y lisas.
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