Es el lugar donde cocinamos, mezclamos olores, dejamos restos en los fogones, a veces en la campana, en la encimera, en el fregador o por supuesto, debajo de los muebles y electrodomésticos. También suele ser el lugar donde guardamos la basura de todo tipo, y en muchos casos también donde comemos. Por lo tanto, donde se pueden encontrar más restos es en el suelo.
Todo esto hace de nuestra cocina un lugar vulnerable para nosotros y a la vez, perfecto para las cucarachas. Es el sitio óptimo para su reproducción. La limpieza estricta siempre es la mejor prevención, pero si a pesar de todo, estos bichos ya te han hecho la primera visita, atiende a estos consejos para eliminar eficazmente cucarachas en la cocina.
¿En qué parte de la cocina se esconden las cucarachas?
Lo primero que tienes que saber para poder acabar con ellas es dónde están. Las cucarachas entran a las casas a través de las tuberías, por puertas y ventanas, el alambrado o en todo caso, algún agujero que comunique tu casa con el exterior o con la casa infectada de un vecino. Esto nos da una pista de los lugares que más les gusta frecuentar: zonas húmedas, sucias, pequeñas y oscuras.
Por eso, las cucarachas suelen estar escondidas en grietas o agujeros que tengamos en paredes y suelos, en bolsas de basura, en algún hueco que tengamos olvidado en el armario o incluso en el marco de puertas y ventanas. En la cocina, lo más común es encontrarlas junto al cubo de la basura, debajo de los electrodomésticos, en los fondos de armarios o en los accesos a una terraza o un lavadero.
El mejor remedio es no tener que ponerlo
Ahora que sabemos dónde están o dónde pueden llegar a estar, tenemos dos puntos de actuación. El primero, obviamente, es la prevención. Si vives en alguna zona propensa a que las cucarachas habiten en ella o crees que tu hogar cumple las condiciones idóneas para ellas (humedad, calor, descuido de limpieza, etc.), lo mejor que puedes hacer es no esperar a tener el problema.
¿Cómo prevenimos su llegada? Vamos a pensar en nuestra cocina.
Todos los lugares sospechosos deben estar sellados y limpios. Empezaremos por el fregadero. Poner un tapón en el sumidero puede ayudar a que, si hay cucarachas en tus cañerías, no traspasen la fina línea que separa su mundo del tuyo.
Los grifos, por ejemplo, también son un elemento importante a tener en cuenta. Hay que evitar cualquier rotura o fuga, es decir, que no haya goteras y que el agua fluya con normalidad. También venden tapones para el grifo, que no solo te ayudará a evitar visitas indeseadas, sino que de paso ahorrarás agua si tienes algún problema con la instalación.
Por otro lado, recuerda que la mayoría de las veces las cucarachas visitan tu hogar porque tienen algún motivo para hacerlo. Algo ha llamado su atención y quieren formar parte de ello. Ahí es donde más podemos prevenir. En la cocina, evita que tras manipular los alimentos y consumirlos, quede algún tipo de restos, migas o incluso envases vacíos durante mucho tiempo.
Las cucarachas se sienten muy atraídas por el azúcar, y la mayoría de los alimentos que tomamos hoy en día lo llevan. Cualquier pequeño resto que a ti te pueda parecer insignificante, a ellas les parece un manjar.
Por último, recuerda sellar bien la basura durante las noches y sacarla antes de que pase demasiadas horas en tu casa.
La mejor defensa, un buen ataque
Si estos insectos finalmente llegan a tu cocina, no te preocupes, ya que puedes acabar con ellos. Solo necesitarás un poco de paciencia y algunos trucos. En primer lugar, realiza todos los pasos de limpieza y acondicionamiento que hemos dicho anteriormente.
Es muy importante que no sigan entrando más para que un pequeño problema no se convierta en una plaga incontrolable, y además, limpiar la zona y tapar agujeros también sirve para evitar que sigan considerando tu cocina un lugar favorable. ¿Y ahora, cómo eliminamos las cucarachas? Aunque no lo creas, en tu propia cocina puedes encontrar bastantes cosas que les encantan. Por ejemplo, el azúcar las vuelve locas, y seguramente tengas una fruta, un terrón o algún alimento como el yogur o cualquier dulce que puedas utilizar para tenderles una trampa. Es un buen modo de llamar su atención si quieres acabar con ellas, pero no sabes dónde están.
Puedes hacer una trampa con cualquier recipiente que rellenes con agua y donde introduzcas este alimento, ya que acudirán a él pero morirán ahogadas. También puedes utilizar el café, otro olor que les encanta.
Hay un sinfín de remedios caseros para eliminar cucarachas, pero si has llegado demasiado tarde y lo tuyo es una plaga, lo mejor es que llames a algún especialista en la eliminación de insectos, ya que las cucarachas pueden aumentar su número de una manera muy rápida mientras permanecen desapercibidas, y entonces sí son muy difíciles de eliminar.
Los aerosoles convencionales, también conocidos como insecticidas, se pueden encontrar en cualquier supermercado o tiendecilla de pueblo, pero no son todo ventajas. Aunque su manejo es sencillo y son bastante efectivos en su aplicación directa a las cucarachas, sus componentes tóxicos lo son también para humanos y animales, por lo que los miembros de la familia y sus mascotas también respirarán un producto perjudicial para la salud.
Sin embargo, en muchas tiendas también venden trampas con cebo, muy eficaces para eliminarlas en sitios donde se encuentran concentradas como en la cocina.
El bicarbonato es algo fácil de encontrar en todas las despensas de las cocinas habituales. Pues bien, es veneno puro para ellas. Mézclalas con algún ingrediente que les guste y conseguirás tu trampa venenosa.
El ácido bórico es, probablemente, el químico más potente para su eliminación. Sin embargo, para su tratamiento necesitarás guantes para evitar que roce la piel, y deberás prestar especial atención a los más vulnerables que vivan en casa, es decir, mascotas y niños deberán alejarse de su alcance.
Estas son unas cuantas soluciones para eliminar cucarachas en la cocina, aunque insistimos en que la mejor manera de evitar inquilinos indeseados es una buena prevención. Cuando se trata de eliminarlas, sin embargo, contamos con una gran cantidad de geles, aerosoles, repelentes eléctricos y trampas.