Son muchos los hogares que tienen oro tanto en la decoración como en joyas. Quizá te hayas dado cuenta de que el oro que tienes en casa ha dejado de brillar como lo hacía antes o incluso, lo ves como si se estuviera ennegreciendo. Ya no está igual de bonito que antes y no sabes qué hacer para solucionarlo…
A continuación te vamos a dar algunos consejos para que puedas limpiar el oro que tienes en tu casa y que además, lo dejes reluciente y que parezca que está nuevo.
El oro
El oro puro es siempre oro de 24 quilates. Si tu pieza tiene menos de 24 quilates, esto indica que está mezclada con otros metales, llamados aleaciones, para aumentar su dureza y durabilidad. Este no es necesariamente algo malo. El oro es un metal blando y es propenso a rascarse, por lo que mezclarlo con 10 o más piezas de aleación aumentará su longevidad, aunque también puede perder brillo con el paso del tiempo.
Una vez sabido esto, no te pierdas cómo puedes limpiar el oro y que a partir de ahora, tu oro brille en tu hogar como el primer día. No es necesario que te gastes mucho dinero en productos para limpiarlo, porque hay otras maneras que puedes usar para obtener buenos resultados.
Cómo limpiarlo con jabón normal
Necesitarás dos vasos de agua tibia, líquido para lavar los paltos, un cepillo de dientes con cerdas suaves. Tendrás que seguir los siguientes pasos: remoja las joyas en una solución de jabón (añade unas gotas de líquido suave para lavar los platos en un recipiente lleno con dos vasos de agua tibia). Mete las piezas de oro en la solución que acabas de hacer y permite que estén en remojo durante 15 minutos.
Una vez pasado el tiempo remueve y frota la suciedad hasta que la hayas quitado. Coge una pieza de joyería de la solución y frótala suavemente con un cepillo de dientes de cerdas suaves para eliminar la suciedad que pueda tener en rincones o grietas. Después, tendrás que enjuagar con agua tibia y meter en otro recipiente de agua limpia y tibia para quitar los residuos que queden de jabón.
Por último, deberás usar un paño suave, secar bien las joyas o elementos de oro para devolverles el brillo que tenían originalmente.
Limpiar con jabón para platos
La carbonatación del jabón para platos con agua ayuda a disminuir la suciedad y los desechos acumulados, limpiando así el objeto de cualquier impureza. Primero deberás diluir el jabón en un plato vistiendo 1 cucharada de jabón para platos en un tazón. Después añade aproximadamente 3 cucharadas de agua tibia y mezcla suavemente para formar una solución jabonosa. A continuación remoja el objeto de oro en la solución jabonosa durante unos 15 minutos. El agua tibia y jabonosa se abrirá paso en las grietas y grietas, lo que debilita la acumulación de suciedad persistente.
Por último tendrás que limpiar, fregar y enjuagar. Mezcla un lote nuevo de líquido suave para lavar platos y agua tibia para crear una solución jabonosa. Empapa un cepillo de cerdas viejas en la solución y frota suavemente el objeto. Trabaja a lo largo de las esquinas y zonas más intrincadas. Enjuaga con agua y deja que se seque completamente antes de usarlo de nuevo.
Pasta de dientes
La pasta dental actúa como un abrasivo suave para ayudar a aflojar la suciedad acumulada en los objetos de oro, sin rayar la pieza. Primero tendrás que mezclar la pasta de dientes y el agua, después exprime una pequeña cantidad de pasta de dientes en un vaso y vierte una cantidad generosa d agua, hasta que tengas una solución espesa.
Es mejor usar una pasta dental suave para limpiar los objetos de oro. Las pastas de dientes para blanquear los dientes pueden dañar el oro. A continuación empapa un cepillo de dientes en la solución, frota y enjuaga el objeto. Empapa un cepillo de dientes viejo en la solución, luego frota suavemente las joyas de nuevo. A continuación enjuaga con agua para eliminar cualquier residuo de la solución en el objeto.
Limpiar con cerveza
La cerveza sirve como una solución increíble para limpiar y restaurar el brillo de los objetos de oro. Vierte la cerveza en un vaso y empapa en el objeto con una pequeña cantidad de cerveza en un tazón y sumerja tu objeto de oro en él. Permite que el objeto esté dentro de la cerveza durante 5 minutos.
Coge un cepillo de dientes, frota el objeto y enjuaga. Tendrás que coger un cepillo de dientes viejo y frotar el objeto de oro suavemente. Cerciórate que en los extremos y las esquinas está bien limpio. Enjuaga con agua y seca.
Peligros que tienes que evitar
Debido a la alta probabilidad de que las joyas de oro se empañen, hay un par de sustancias específicas para evitar:
Jabón fuerte: deberás mantenerte alejado de cualquier jabón con ingredientes desconocidos. Es mejor utilizar jabones suaves o el de los platos para conseguir mejores acabados.
Cloro: el cloro, especialmente a altas temperaturas como en una bañera de hidromasaje, puede dañar o decolorar permanentemente tu joyería o elementos de oro, por lo que es mejor que lo evites para la limpieza del oro.
El artículo ha sido originalmente publicado en Decoora.