Una vez superados los primeros tres meses, después de enterarte de la gran noticia “¡¡Estás embarazada!!” hacerte a la idea del cambio que va a suponer en tu vida, y decirle adiós (no todas) a vómitos, mareos, primeras incertidumbres y miedos, uno de los temas que más tiempo nos va a ocupar, y al cual nos enfrentamos con más ilusión, es el montar la habitación del bebé.
Algun@s partimos de tener ya algo montado en su lugar, otr@s arrancáis desde cero, pero como consejo personal, en base a mi propia experiencia, creo que antes de liarse la manta a la cabeza, y comprar aquello que nos ha enamorado, debemos plantearnos ciertas cuestiones, estudiando bien las diferentes opciones, para que ese espacio pueda ir evolucionando con la edad del bebé, sin que ello nos supongo un gran problema económico y de espacio.
En ésta primera parte hablaremos sobre ventajas e inconvenientes de los moisés, minicunas, cunas y cunas convertibles en camas, también qué tener en cuenta para elegir el colchón, y por último repasaremos la ropa de cama necesaria e ideal para la comodidad y seguridad de nuestro bebé.
¡¡Sí, son un montón de opciones posibles!! Pero tranquil@s vamos a ir paso a paso:
—-¿Moisés, Minicuna o Cuna?—-
Moisés
Ten en cuenta que como máximo te durará hasta los 4 meses, dependiendo del tamaño del moisés y del bebé, normalmente los moisés suelen ser de menor profundidad, por lo que es posible que tengas que dejar de usarlo mucho antes, por dos motivos:
- El peso del bebé excede lo recomendado por el fabricante
- No te inspira confianza, ante los movimientos de tu bebé
Sinceramente creo que es la opción menos útil de todas, ya que es difícil saber el tiempo que puedes contar en él, y en cuanto a precios, se equiparan al precio de las minicunas.
Minicunas
Aquí podemos ganar algunos meses más (en mi caso hasta los 5 meses), pero también dependerá de lo comentado para el moisés, del peso del bebé, y que tengamos plena convicción en cuanto a su seguridad.
Podéis llegar un poco a la misma conclusión que el moisés, pero yo tenía claro que la necesitaba, por varias razones:
- Cómo buena madre primeriza, necesitaba tener a mi hija conmigo, a poca distancia, dónde pudiera supervisar, cualquier movimiento, o sonido, y no quería depender de ningún aparato, que para mi no me aportaban suficiente control, y claro la cuna por dimensiones, no podía moverse a mi antojo, cosa que la minicuna si hacía.
- En base a lo primero, como comprenderéis no iba a dejar que mi pequeña durmiera en su habitación sola a edades tempranas, ¡Había que buscar sitio en nuestra habitación! Como no es demasiado grande, y el único sitio dónde se podía ubicar, pegaba con un armario, decidimos que era importante durante los primeros meses al menos, disponer de mayor espacio físico, para poder ir haciéndonos al manejo.
- Tenemos un trastero dónde podemos almacenar, aquellas cosas que ya no usamos, por lo que el problema del espacio (después) no era un gran problema, en cuanto al tema monetario, conseguimos que nos saliera bastante económica, al ser un modelo descatalogado (fuera de producción).
Cuna
Colocar directamente la cuna, pienso que es una buena opción, y además la más económica, siempre y cuando no te surjan mis mismas inquietudes de madre primeriza.
—- ¿Cuna o Cuna convertible? —-
Cuna
Yo opté por comprar una cuna normal, por varias razones:
- Ya tenía una cama en esa habitación, (restauramos la habitación de mis hermanos)
- Tenía claro que no se iría a su habitación sola, hasta después de bastante tiempo.
- Tengo sitio dónde colocar la cuna después de su uso.
- Para mi, era la opción más económica.
Cuna convertible
- Cómo más práctico ésta opción sin duda, ya que puedes usarla durante muchísimo más tiempo.
- Qué sea más económica o no, (con respecto a cuna+cama) dependerá del modelo elegido, ya que aquí los precios pueden dispararse mucho.
- Ese doble uso, limita en cuanto a modelaje, pero también en cuando a usos futuros, con ésto me refiero a que no puedes ir comprando el mobiliario conforme a necesidades del momento.
- Suelen ser más pequeñas, ¿Has pensado cómo vas a solucionar si tienen miedo y no quieren dormir sól@s?
—- El colchón —-
Una vez tenemos claro esa parte, ahora viene algo cuanto menos farragoso ¿Qué colchón elegir?
Como padres queremos lo mejor para nuestros hijos, y a todos nos asusta pensar en las consecuencias de una mala elección, con respecto al lugar dónde nuestro bebé pasará la gran mayoría del día (16 horas de media), el lugar en el cual se terminará de formar, y sobre el que debe encontrar el descanso y bienestar necesario para que él pueda seguir creciendo (y que a nosotros nos permita conciliar el sueño).
Recuerdo perfectamente como cuando tomamos nuestra decisión, ésta fue en base a una recomendación pura y dura de la vendedora, no por convicción, ya que las diferentes opciones parecían ser válidas, y no supimos ver grandes diferencias entre ellas (espuma, visco, látex, muelles, …)
Yo no voy a entrar en esos temas, sobre los que no tengo suficiente información, o en los que incluso he encontrado bastantes contradicciones, dependiendo donde se mire, pero sí me gustaría comentar todo lo que desde mi punto de vista debemos mirar y tener en cuenta, en base a ciertas cuestiones en las que sí parece que existe unanimidad y sobre lo que sí existen estudios médicos que lo amparan (por ejemplo aquí, aquí y aquí):
1/ Ha de ser confortable pero firme, (aunque firme, no significa duro), ¿?¿? tranquilidad intento aclarar éste punto, el colchón debe mantener la posición correcta de nuestro bebé, si es muy firme imaginaros lo poco confortable que puede ser, y si es demasiado blando, las zonas más pesadas del cuerpo del bebé se acabarían hundiendo, por lo que además de no cumplir su misión, podría resultar bastante peligroso.
2/ Transpirable, éste punto parece ser muy importante según varios estudios médicos; a todos nos preocupa enormemente el Síndrome de muerte súbita, y aunque por desgracia aún se desconocen las causas exactas, la mayoría de expertos recomiendan para evitarlo, que el bebé no se caliente en exceso mientras esté durmiendo, en los colchones transpirables, al circular con mayor facilidad el aire, ayudamos a que no se acumule el calor; también en cuestión de ácaros y bacterias, cuanto más transpirable, menor es la humedad, y por tanto menor el número de estos.
3/ Mejor si el colchón dispone de tratamientos antiácaros, y bactericida, o si esto no fuera posible, utilizar sábanas y fundas con éstos tratamientos, para evitar problemas de alergias, asma o cualquier otra complicación médica, al actuar como barrera higiénica impidiendo su proliferación.
4/ No reutilizar colchones, ésto es algo de cierta lógica, si tenemos en cuenta el punto anterior; es fácil de entender que un colchón que tenemos desde hace cierto tiempo, que además, ha pertenecido a otro bebé, y el cual hemos (probablemente) almacenado, haya acumulado ácaros, o bacterias, que pueden afectar el organismo más o menos inmaduro del bebé.
5/ Comprobar las dimensiones con respecto a la cuna, esto también es muy lógico, y básicamente es para la seguridad de nuestros pequeños, debe quedar lo más ajustado posible, para evitar atrapamientos.
Luego existen en el mercado colchones que además, de cumplir con esos requisitos, conllevan otros beneficios incorporados, aquí es cuestión de aplicar la lógica, el sentido común, saber el presupuesto con que contamos, y buscar la mejor opción para nosotros, en ésta web de un fabricante español Maxcolchón tienes varias opciones en distintos materiales.
También en la web de Maxcolchón he descubierto, el que sería el colchón ideal, y sin dudarlo hubiera sido mi elección, ya que sentía verdadero
Imágenes vía: Kolegram
—- Ropa de cama —-
- El forro cubre colchón, es algo que no puede faltar en ninguna cuna, yo contaba con varios, y hubo noches en que me hubiera faltado otro más, mi hija vomitaba con bastante facilidad y frecuencia, con lo que el tener más de uno, era algo imprescindible.
- En cuanto a las sábanas, yo lo tenía claro 100% algodón, además lavadas previamente sólo con vinagre, para evitar problemas con la dermatitis atópica, algo demasiado común en los niños, en los últimos años.
- En cuanto a el cojín protector para cunas o lo que comúnmente conocemos como chichoneras, según todas las recomendaciones de seguridad deberían de evitarse, pero también por experiencia, el quitarlo o no ponerlo conlleva el no pocos golpes, no sólo en la cabeza.
- Almohada, como sabéis, es algo que los pediatras no recomiendan, por lo que de momento nos olvidamos de ella.
- Colchas y mantas, en base a lo comentado para el Síndrome de muerte súbita, evitar las tipo nórdicos, para intentar que no sé produzca un calentamiento excesivo del bebé, y el resto, con precauciones, siempre bien cogido con el colchón, para evitar ahogos en algún descuido.
Pues hasta aquí el post de hoy, ¡¡¡Sí es de los megapost!!!, pero tenía un montón de ideas que quería compartir con vosotr@s, espero que a los papis y mamis primeriz@s les sirva de ayuda, porque al principio uno está muy perdido, y hay tantas decisiones por tomar.
En nada volvemos con mucha inspiración, ideas geniales y mucha decoración con estilo ¿Te lo vas a perder?
Pasad un estupendo día, y ya sabéis si os ha gustado compartidlo en redes sociales, es facilísimo
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