Tener amigas que te conocen bien, qué se acuerdan de ti cuando están de
viaje, descubren una cucada de tienda japonesa en Bilbao (YUME),
escogen algunos detalles que sabe te van a encantar y te los traen
como souvenir... no tiene precio.
¡Gracias Cris! ^-^
Unos calcetines de geisha, un libro con papel de origami e instrucciones para
hacer animalitos y dos pliegos de papel japonés tengujo de alta calidad con
bellos motivos le alegran el día a cualquiera, ¿no os parece?
Me faltó tiempo para dar uso a uno de los pliegos: un cuaderno de pastas
duras con el tengujo de florecitas, un DIY con el que hoy participo en los
Findes Frugales de Marcela Cavaglieri.
Los materiales que utilicé los tenéis en la imagen superior: un cartón, hojas de
papel de dibujo, tijera, plegadera, punzón, aguja, hilo grueso, brocha, cola y,
por supuesto, el precioso papel.
Ya os hablé de la fibra japonesa de tengujo en un post anterior (aquí),
tiene la misma composición de la seda pero mientras ésta la fabrica el
gusano, el tengujo es fabricado por el hombre.
Es pues una fibra muy especial de la que existen distintos gramajes.
Yo había trabajado con algunos más ligeros y sin estampar por eso cuando
descubrí los que me regaló Cris quedé impresionada.
El cartón que utilicé procedía de un paquete de sábanas, traía ya las puntas
romas y lo único que tuve que hacer fue doblarlo por la mitad con la ayuda
de regla y plegadera.
Corté papel de dibujo con medida algo menor que el cartón.
Un haz de unos diez pliegos que una vez doblados supondrán veinte hojas.
Doblando a la mitad el haz de papel, iremos practicando agujeros con una
separación de 1 cm. a lo largo del doblez.
Después iremos cosiendo como un pespunte.
Llegados al otro extremo del doblez, volveremos dando puntadas en
dirección contraria y acabaremos anudando los extremos.
Se trata de una encuadernación sencilla puesto que vamos a utilizar
un solo cuadernillo.
El siguiente paso será redondear los extremos de las hojas con la forma del
cartón que nos servirá de tapa: ponemos el cartón sobre el cuadernillo y
señalaremos la forma roma. Después cortaremos con tijera.
Pasaremos a forrar nuestra tapa aplicando pegamento sobre el cartón,
extendiéndolo con una brocha y colocando el pliego de tengujo que iremos
presionando suavemente con la plegadera para que quede bien adherido.
Practicaremos unos pequeños cortes en los extremos para conseguir
un buen acabado redondeado de las puntas.
Finalmente solo habrá que extender pegamento por el interior de la tapa y
pegar el cuadernillo de hojas que preparamos, de modo que la primera y la
última hoja harán de guardas.
Dejaremos secar con peso encima.
Ya tenemos un precioso cuaderno que podremos utilizar como agenda
para apuntar cosas importantes...
O podemos utilizarlo como herbario guardando nuestra colección de
plantas secas preferidas...
O como cuaderno donde escribir nuestros pensamientos, poemas, textos...
O practicar lettering.
Espero que paséis un feliz fin de semana... nos leemos el lunes.
Fuente: este post proviene de hampton sc, donde puedes consultar el contenido original.
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