Lograr que entre las estancias de la casa exista una comunicación fluida es importante en los pisos pequeños, ya que en la mayoría de los mismos las habitaciones se integran para evitar la sensación de agobio que producen las cuatro paredes. A la hora de buscar elementos que faciliten la diferenciación entre zonas que comparten una misma superficie, tenemos varias alternativas. Una de ellas son los biombos, piezas articuladas cuya presencia es sinónimo de intimidad.
Gracias a su carácter móvil, esta mampara pone en nuestra mano la opción de situarla en el lugar que queramos en cualquier momento. Tras sus bastidores es posible, por ejemplo, ocultar un despacho ubicado en el salón o crear un vestidor en nuestro dormitorio. Los materiales con los que se construyen los biombos son de lo más variado: madera, plástico, cristal, forja. Además, las tres, cuatro o más pantallas que los conforman pueden ser ciegas, caladas, incluir accesorios, etc. Te presentamos unos cuantos modelos.
Blanco y negro vuelven a la carga para poner a tu alcance un sinfín de estampados actuales. La fuerza de los dibujos que recuerdan al barroco no ha pasado de largo en Fron, que presenta un biombo muy cercano a esta rica estética. Por otro lado, la firma emplea el contraste entre estos dos colores para dos ejemplos más de su catálogo: uno con flores y otro que imita la piel de vaca.El mundo vegetal inspiró a Zanotta para crear el biombo Fiore, fabricado en material sintético de alta calidad. Sus tres hojas de color blanco muestran flores troqueladas en láser, por lo que resultan magníficas aliadas para dejar pasar la luz. Un efecto similar consiguen los calados del modelo Polonia, de Habitat, sólo que la base de su diseño es la madera
En los tiempos que corren, ya no somos capaces de conformarnos con un mueble que sólo obedezca a una función. Es el caso de Softwall, de B&B Italia, un biombo de una sola mampara que no sólo significa una transición entre dos ambientes, sino que incluye apartados en los que colocar infinidad de objetos: libros, revistas, fotos… Una idea realmente ingeniosa.
Tanto Audrey Hepburn como Marilyn Monroe alcanzaron la categoría de divas y dejaron, cada una con su particular estilo, una huella imborrable en la historia del cine. Disfrutar de su encanto para siempre es sencillo si nos decidimos por alguno de los biombos de Fron en los que sus rostros, bien en blanco y negro, bien en color, sirven de recurso para ilustrarlos.