Definitivamente, la estética para decorar un ambiente no tiene un modo único. Cada persona tiene un gusto y una percepción distinta, llegando muchas veces a ser opuestos totales. Pero lo que sí queda claro es, que hay punto en común que deben considerar para plasmar la idea que se tiene en mente. Se debe tener en cuenta algunos consejos de decoración y dejar libre un poco nuestra creatividad para diseñar espacios funcionales y cómodos.
Tener el “producto final” en mente antes de comenzar
Con una idea previa de cómo se va a querer decorar, se gana tiempo y además se puede distribuir adecuadamente cada uno de los objetos.
Plasmar la idea en una hoja o agenda
El hecho de realizar los respectivos cambios siguiendo un modelo ya establecido es más fácil arreglar. Además, cambiar el orden de las cosas “en el papel” es más práctico que hacerlo realmente.
Considerar no solo muebles, sino hasta el detalle más mínimo (adornos, cuadros, adornos, columnas, paredes, enchufes, conexiones, iluminación, entre otros). Si es necesario deshacerse de algunas cosas en bien del diseño o para ganar espacio, no dudar en hacerlo.
Diferenciar los ambientes con cosas a la mano
Si en un lugar, se desea crear dos zonas distintas dentro de un mismo lugar, se puede hacer con apenas cosas pequeñas como: una alfombra, un aparador, biombo, distinta decoración de color y adornos en paredes, entre otros.
Considerar el tamaño del cuarto
Siempre va a ser necesario tener una zona de tránsito, por ese motivo se deben ubicar los muebles de acuerdo a la forma del recinto: Si es largo y estrecho, instalarlos junto a la pared de modo que quede una zona libre; si es zona cuadrada, determinar “puntos” de tránsito y de zona rígida.
Optimizar espacio al máximo
Además de una correcta organización, el uso de muebles multiusos es una estupenda idea (sofá-cama, estantes divisibles, entre otros), así como las puertas corredizas en lugar las convencionales. Aprovechar las columnas o muros salientes para empotrar allí algún armario o estante.
Para conseguir una sensación de jovialidad, puedes emular a la madera verde con tonos en este color, fibras naturales como el lino o el algodón, y elementos decorativos con líneas verticales, alargadas y rectangulares.
Emular el metal o fuego
Otra buena opción es emular al fuego. Puedes utilizar formas cónicas y piramidales, colores rojizos y anaranjados. Para este efecto, se utilizan elementos decorativos de origen animal, tales como pieles, plumas, lana o seda.
También se puede emular al metal, logrando un estilo futurista. Este material transmite frialdad y poca afectividad, resulta conveniente en estudios y lugares donde se requiera una especial concentración. Se utilizan rocas como el granito o el mármol. Las formas circulares y el color blanco o gris satinado son típicas en este diseño.
¿Qué te parecen estos excelentes consejos de decoración? Son ideas simples y no queda más que ponerlos en práctica.
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