El mobiliario de cocina suele tener unas medidas muy estandard aunque cuenta con una gran variedad de estilos decorativos. Cuando pensamos en isla, antes hay que pensar en cuál va a ser su función, si va a ser simplemente almacenaje, si parte se va a destinar a cocinar y otra a comer, si va a llevar electrodomésticos, etc… La función que se le de, marcará el tamaño de la misma. Si quieres que la isla tenga fregadero o pequeños electrodomésticos, necesitarás más espacio y su ubicación deberá ser cómoda. Si simplemente se destina a la preparación de alimentos, necesitarás a mano la zona de basura y reciclados. Si es para comer algo rápido o informal, deberás dar prioridad a la zona de asientos.
Si, por suerte, cuentas con una cocina amplia con muchos armarios, contar con almacenaje adicional en la isla no será una prioridad. Pero si es tu zona principal para la preparación de alimentos, debería incluir un fregadero y tener espacio suficiente para los aparatos de cocina, incluidos los utensilios y demás elementos de uso habitual de cocinado.
Particularmente me gustan las islas que incluyen zona de comer con taburetes altos de 110 cm. Una barra con taburetes altos añade cierto grado de estilo y versatilidad al diseño. Se crean así dos niveles, uno más bajo destinado a zona de trabajo y uno más alto con los taburetes para comer. Es importante que la zona de trabajo de la isla se ‘coordine’ con la zona de encimera situada detrás de ella y no olvidarse del espacio que circula a su alrededor, contando con 85 a 90 cm de separación.
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¡Feliz día a todos!
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