Una cocina-comedor de planta abierta luce muy fresca, recogida con un telón de fondo blanco y mobiliario predominantemente gris, sin embargo, el esquema de marcado impide que se muestre demasiado frío, con un suelo de madera que realza el contraste de este diseño.
Esta habitación explora una historia de sombras, pero además presenta obras de arte que le aportan una referencia visible de la naturaleza.
Las flores son un método rápido y sencillo de llevar los encantos del exterior hacia el diseño interior.
Incluso una pieza aislada de mobiliario elegido en el tono de madera puede elevar un esquema sombrío.
Cuando de adornar el mobiliario se trata, muchos eligen una paleta de mezcla en crema, sin embargo en contraste, la pintura negra proporciona un resultado con mayor contraste.
Una mezcla de acentos de madera y cromados dan un aspecto crujiente.
Una ramo de flores refresca prácticamente cualquier contexto.
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