Las viviendas que transmiten sensaciones son aquellas de las que me quedo absolutamente prendida. En casa de aquellos que nos dejan descubrir un poco mas de su personalidad, y es así como me he trasnportado a A House of the Hills.
Hoy (no podía ser de otra manera) me encontré en medio de una cálida playa, disfrutando de una brisa refrescante y de la luz de un día que se alarga y alarga durante horas.
Pero solo era esta una sensación…de repente asome la cabeza por la ventana, descubrí la ola de frío que prácticamente inunda la península, y me volví a mi realidad gris de oficina y frío polar.
Nada de color, ni dorados, ni mucho menos brisa, pero si ese punto de encuentro entre catálogos, descubrimientos y porque no …pensar en alto en cada nuevo proyecto y en esa cálida proyección de verano.
Hoy sera por ello por lo que he sacado ese punto cotilla, colándome en este fantástico interior de A House of the Hills, que nos trasporta a un espacio cálido, paradisíaco, calmado y elegante.
Repleto de detalles y figuras doradas, sin dar la sensación de recargado,y que se ha vuelto un espacio acogedor y algo retro.
Piezas como un sofá de cuero, lamparas Cooper, o unas alacenas años 70, transportan la modernidad y el encanto del pasado a un espacio delicado, luminoso y muy acogedor.
Yo me quedo pensando en sensaciones en casa de A house of the Hills.
via