Gonzalo Borondo pintó en la fachada rojiza a 5 figuras masculinas abrazadas haciendo una configuración circular y sobre ellos, los pies de un hombre que Edoardo Tresoldi culmina elaborando la postura de la misma figura apoyandose en la fachada como intentado subirse a lo más alto de la misma.
He de reconocer que yo soy un poco escéptico con el arte urbano, pero no por ser alguien cerrado o anticuado. Soy escéptico porque no todo me parece arte urbano ni todo es de admirar como muchas veces pasa. Se pinta cualquier cosa y se tiene que considerar un arte. Está claro que cada artista tiene su visión del arte, de su trabajo y de su pintura. Todos son de admirar desde el punto de vista del trabajo y de la sensibilidad del artista con su obra. Pero estéticamente no todo vale, no todo tiene un valor superior a lo que existe sólo por ser una expresión artística y no todos los lugares valen como lienzo para expresar dicha sensibilidad artística. En este caso, Gonzalo Borondo y Edoardo Tresoldi han elegido un lugar perfecto, un lugar rodeado de gente joven como la universidad y un edificio sin ningún valor artitectónico y sin embargo la obra de estos dos artistas hace que suba como la espuma y rodeado de gente joven que sabrá valorar su trabajo.
Disfruten de la obra de estos geniales artistas que sin duda, volveremos a traeros para disfrutar de su genial obra.
Espero que os haya gustado el post de hoy. A los que estáis de vacaciones solo espero que estéis disfrutando mucho de vuestros días de descanso. Nosotros seguimos en la senda de traeros ratitos de buen gusto y trabajando duro para todos ustedes. Un abrazo!!
PD: la postura de la escultura, la manera de apoyarse en el muro y las arrugas de la camisa son una genialidad.
Fuente: Design Boom