Y así lo he ido haciendo poco a poco únicamente en aquellas zonas que me pedía a gritos una nueva decoración. Después de realizarlos me di cuenta que mi cocina, además de añadir algún toque en verde {en esta ocasión elegí incluir plantas nuevas}, necesitaba algo más. Con poco, con un simple detalle, puedes cambiar el look de un espacio tan dinámico como la cocina. Puedes darle color y algo de vida con una alfombra bonita.
En cocinas monocromáticas completamente blancas o donde prima la madera, la elección de la alfombra para realzar el espacio es una estupenda opción.
Debes elegir aquella alfombra que más se ajuste a este espacio según el Feng Shui:
Colores vivos pero sin geometrías para no potenciar demasiado el elemento fuego.
Rectangulares para separar la zona de cocción con el fregadero si tienes una cocina con isla.
Cuadradas para separar la zona de la cocina con el comedor si no lo tienes % de otra manera.
Redondas para cocinas blancas y de gran tamaño.
A veces un simple detalle es el que de verdad cuenta... así que
¡¡Pon una alfombra bonita en tu cocina!!
Gracias por tus comentarios