Porque todos merecemos dedicarnos un poco de tiempo a nosotros mismos de vez en cuando, creo que un baño relajante es una opción ideal para inaugurar esta sección. Debemos ( y podemos ) crear un “momento” libre de preocupaciones, del estrés de la vida diaria, de la rutina que nos consume … Si nos dedicamos un tiempo a nosotros mismos de vez en cuando estoy segura de que repercutirá en todo lo que nos rodea, estaremos más alegres, más tranquilos, con mejor humor, más receptivos … ¿ Quieres más ? El agua caliente ayuda a relajar los músculos y liberar la tensión muscular, a relajar la mente, eliminar el estrés y la ansiedad, estimula el sistema inmunológico, mejora la circulación …
Pongamos en marcha la máquina y veamos qué necesitamos para crear el baño relajante perfecto:
Lo primero que debemos hacer es conseguir 30 minutos … ¿ Te parece difícil ? Yo creo que no lo es tanto, piensa en todos los minutos que pierdes al día, seguro que son muchos!, el secreto está en la organización. Lo ideal es hacerlo a última hora, antes de ir a dormir y así conseguiremos descansar mejor ¿ da pereza ? Pruébalo un día … seguro que repites ! ( recuerda una cosa, sumergidos no debemos estar más de 15-20 minutos ).
Cuando hemos conseguido reunir nuestros 30 minutos ya podemos empezar a preparar el baño. Es importante, repito, importante, que no tengamos ninguna tarea pendiente para luego, es decir, debemos tenerlo todo hecho ya que será la única manera que realmente nos permitirá desconectar y dejar la mente en blanco … Nada de pensar: uy, no he sacado la ropa de la secadora, he de terminar el informe para enviarlo mañana por la mañana …
Encendemos las velas para conseguir una luz tenue en el baño ya que nos relajará más que la luz de los halógenos o fluorescentes. Si son aromáticas, concretamente de lavanda, mejor que mejor, un plus de relajación añadido, ya que la lavanda ayuda a reducir el estrés.
Ya podemos empezar a llenar la bañera de agua caliente, lo ideal es que esté a unos 30-32 grados. Mientras se llena vamos preparando la música, un equipo portátil, un mp3 con altavoces … La música perfecta es la instrumental o con sonidos de la naturaleza ( recuerda que buscamos relajarnos … así que nada de música de discoteca o heavy metal ;) ). Y sé que no hace falta que lo diga, pero yo lo digo por si acaso … equipos de música conectados a la corriente alejados del agua por favor ! Lo que buscamos es relajarnos … no salir con los pelos de punta …
Ahora ya podemos poner las sales de baño en el agua caliente, ésta hace que se abran los poros y estén más receptivos a las propiedades terapéuticas y curativas de las plantas ( un punto positivo más para tomarse un relajante baño … ). Yo os voy a proponer una opción más económica y original, la leche. Sí, sí, la del desayuno de la mañana. Basta con añadir dos o tres vasos de leche caliente al agua del baño. El ácido láctico eliminará las impurezas y pieles muertas, dejando la piel suave y lisa. Si queremos que sea un baño más aromático y nutritivo podemos poner a hervir un cazo con leche y añadimos canela, nuez moscada, manzanilla o tila y un par de cucharadas de miel. Echamos esta mezcla al agua caliente de la bañera, mezclamos y … el relax está asegurado.
¿ Te gustan más los aceites esenciales ? Los hay para todos los gustos: Aceite de lavanda para relajar y tonificar, el aceite de eucalipto es estimulante y balsámico, el aceite de romero relaja, es desinfectante y curativo, el de pino es muy apropiado para personas que padecen reumatismo y el aceite de menta es analgésico y refrescante.
Podemos completar la escena colocándonos dos rodajas de pepino en los ojos … Los deshincharán y ayudarán a reducir un poco las ojeras.
Ya tenemos luz ambiental gracias a las velas, música de fondo, agua caliente con nuestro producto preferido … Ahora toca relajarse, no pienses en nada, N-A-D-A, simplemente escucha la música y siente el agua caliente. ¿ Apetece, verdad ?
¿ No tienes bañera ? No pasa nada, puedes conseguir el mismo efecto utilizando la misma ambientación, siente el agua caliente como cae sobre la piel, usa tu exfoliante corporal preferido … Una ducha sin prisas y sin pensar en nada.
Con todo esto habremos conseguido un verdadero momento relax. Cada día no podemos hacerlo pero sí que podemos crear un baño que nos haga sentir bien cada vez que entremos en él. Sin gastarnos mucho dinero podemos convertir nuestro baño en un pequeño spa, sólo tenemos que centrarnos en algunos detalles, complementos de madera, toallas 100% algodón, ambientadores de steaks, organizadores de baño, un buen albornoz, un toallero eléctrico, bonitas velas … Mira mi selección:
Seguro que este fin de semana encuentras un hueco para tu momento relax…
Feliz viernes !
Un abrazo,
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