¡No pases horas planchando!
La clave para no tener que pasarnos tardes enteras planchando montañas de ropa está en tenderla bien, siguiendo estas pautas:
- Camisetas bien estiradas, y dobladas a la altura de las axilas.
- Fundas de cojines, almohadas, toallas… cogidos con pinzas por dos esquinas.
- Pantalones tendidos con pinzas por la cintura, sin doblarla.
- Camisas siempre colgadas por el cuello.
Limpia la casa ¡sin estar en ella!
¿Qué sentirías si al llegar a casa después de un día de trabajo esta se encuentra limpia? Nosotros respondemos por ti, ¡felicidad! Y eso es lo que te proporciona Roomba, tu mejor aliado contra el polvo y la suciedad. Además, Roomba es ideal para cuando tenemos mascotas en casa, ya que la limpieza de los suelos se convierte aún más en una prioridad.
Este robot aspirador alcanza hasta los rincones más imposibles, detecta la suciedad de forma automática, repasando las áreas más sucias, y funciona con un software de navegación que le permite desplazarse por la casa sin problemas, salvando todos los obstáculos y muebles.
¿No sabes si hacerte con un robot Roomba, pero te gustaría probarlo? Pues no esperes más para hacerlo. Entra en este enlace y únete al programa de tester de C.Journey.
¡Utiliza un planning y reparte las tareas!
No hay nada como la organización para reducir el tiempo que invertimos en una tarea, sea del tipo que sea. De esta forma, si planificamos bien por estancias, días y, sobre todo, repartimos responsabilidades entre todos los miembros de la familia, el resultado será mucho más efectivo y, sobre todo, rápido.
Para ello podemos ayudarnos de plannings como estos:
¡La importancia de la ventilación!
Parece una tontería, pero abrir las ventanas del cuarto de baño después de las duchas ¡puede hacer tanto por nosotros! Lo más importante es que impedirá la acumulación de humedad, y con ello la formación de manchas de moho, marcas en los espejos… Por ello, mantener el baño será mucho más sencillo.
La decoración como una ayuda, no como un estorbo
Así es, en ocasiones somos nosotros mismos los primeros en ponernos obstáculos en el camino, también en el caso de la limpieza. De este modo, para hacer que las tareas sean mucho más rápidas llevaremos como bandera el lema ‘menos es más’, y optaremos por encimeras despejadas, cajas para almacenar, pocos detalles decorativos…
Además, en el caso del mobiliario, si no quieres pasarte el día entero con el trapo en la mano detrás del polvo, opta mejor por muebles cerrados y vitrinas, en vez de librerías o estanterías.
¡Vivan las fundas!
Así es, poner una funda en el sofá hará que el trabajo de limpieza lo haga la lavadora por nosotros. Sencillo pero muy efectivo.
Sigue la regla de los 5 minutos
¿La conocías? Esta norma está orientada a la organización, y como hemos dicho, la organización nos lleva a la eficacia y, por tanto, a evitar la pérdida de tiempo. Consiste en que todas las tareas pequeñas que nos requieran menos de 5 minutos debemos hacerlas en el acto y no dejarlas pasar. Por ejemplo, recoger la ropa cuando nos cambiamos, meter los platos en el lavavajillas y no dejarlos en el fregadero (lo que, además, nos hará después perder el tiempo frotando…), colocar el salón antes de acostarnos… ¡Probadlo! ¡Ya veréis cómo lo notáis!
¡Que el cambio de armario no pueda contigo!
Estos consejos nos vienen al pelo, y es que estamos en plena temporada de cambio de armario. Puede que lleguen un poco tarde para la ropa de invierno, pero si los sigues, tu ‘yo’ de la próxima primavera lo agradecerá enormemente.
Empezaremos haciendo limpieza. Así, todo lo roto, desgastado o que no hayamos usado en la pasada temporada, debe ir a la basura o para donar, ¡sin piedad! ;-) Después, todas aquellas prendas afortunadas que vayan a quedarse un año más con nosotros deben ir a la lavadora. Sí, es un engorro, pero lo agradecerás cuando las saques de nuevo y veas que están impolutas y sin rastro de manchas.
Una vez listas (y habiendo sido tendidas correctamente) las guardaremos con cuidado en bolsas, cajas o maletas etiquetadas, atendiendo bien a la manera en la que las doblamos, de forma que intentemos que respete al máximo el aspecto original de la prenda. Por último, para evitar el olor a humedad después de tanto tiempo guardada, usaremos bolsitas de lavanda que colocaremos en el interior de las cajas o bolsas.
¡Anímate y prueba Roomba!
Seguro que de todos estos consejos, lo que más te ronda la cabeza es el robot aspirador Roomba, ¿verdad? Pues te retamos a probarlo y tener tu suelo limpio sin esfuerzo.
Para ello, únete al programa de tester de C.Journey y pon a prueba las bondades de este gran aliado. Además, si quedas convencido, podrás llevártelo a mitad de precio al final. ¡No lo dudes y únete!