Operación Paperclip, detrás de éste anodino nombre se encuentra el plan, que el gobierno de los Estados Unidos ideó para apoderarse de todos los conocimientos científicos que pudieran caer en sus manos al finalizar la Segunda Guerra Mundial, de parte de las potencias derrotas, principalmente de Alemania.
Éste plan incluía a todo el personal científico que pudiera aportar algo al desarrollo de las armas existentes, en proyecto o simplemente en la imaginación.
El principal problema, es que sobre todo la Alemania de Hitler, había basado este increíble avance en material militar avanzado en trabajadores esclavos, experimentos horribles con seres humanos, en el uso intensivo de campos de concentración para el soporte logístico de la gigantesca industria de guerra, en definitiva crímenes de guerra y contra la humanidad de la cual los científicos eran conocedores en el mejor de los casos o activos colaboradores en la peor de las situaciones, como así hicieron muchos de ellos.
Científicos Operación Paperclip
Así se miró para otro lado y unos 1600 científicos amparados por la Operación Paperclip, fueron enviados a los Estados Unidos para trabajar en distintas instituciones científicas y militares, para ello la propaganda americana se afanó en decir que eran buenos científicos que no tenían nada que ver con los nazis y que se necesitaban sus avanzados conocimientos y experiencia ante el nuevo reto que representaba el nuevo enemigo los comunistas de la Unión Soviética.
Por supuesto los nuevos científicos estaban encantados con ello, no solamente habían esquivado a la justicia por las responsabilidades que pudiesen tener de un pasado nazi, sino que les proporcionaban trabajo del que les gustaba, una nueva vida y a su modo seguir luchando contra la odiada Unión Soviética.
Wernher von Braun
El caso más llamativo es el de es el de Wernher von Braun, que pasó de ser el constructor de la V-2, el primer misil balístico operativo, que causo el terror y la muerte sobre todo en Inglaterra y los países bajos a finales de la guerra, a ser gracias a la Operación Paperclip, la cabeza visible de la NASA en la carrera espacial y el responsable final de la conquista de la Luna.
Pero se tuvo mucho cuidado en olvidar que para desarrollar y construir las V-2 y la gran infraestructura que con ello llevaba se recurrió a los campos de concentración, con una mano de obra de usar y tirar, donde la vida humana no valía nada y miles de personas murieron o quedaron destrozadas físicamente por el trato inhumano y el trabajo con materiales altamente contaminantes y peligrosos sin la más mínima protección. Esto von Braun no podía ignorarlo.
Otro caso es el de Walter Dornberger, otro miembro del proyecto de las V-2, al acabar la guerra cumplió dos años de condena en Inglaterra como responsable de usar trabajadores esclavos en el programa de cohetes. Al ser puesto en libertad se trasladó a los Estados Unidos donde trabajó en el desarrollo de cohetes dirigidos.
Arthur Rudolf, uno de los responsables de la planta subterránea de Nordhausen, donde se construían secretamente las V-2 y donde murieron cerca de 20.000 prisioneros trabajando como esclavos en las condiciones más miserables. Esto no impidió que trabajara para la NASA, se ve que la Operación Paperclip tenía preferencia por los científicos relacionados con el programa espacial, pero en 1983 no se pudo ocultar más su pasado y una investigación lo destapó todo, pero en vez de juzgarlo por crímenes de guerra, se le dio la oportunidad de regresar a Alemania.
Arthur Rudolf
Otto Ambros
Otto Ambros, conocido como el químico favorito de Hitler, participó en el desarrollo del gas Sarín una de las armas químicas más horribles y efectivas pero sobre todo desarrolló la goma sintética fundamental para la Alemania Nazi por la falta de materias primas, para ello le dieron el mando de la fábrica de goma sintética que se creó en el Campo de concentración de Auschwitz, ya con esto se dice todo de él, condenado por crímenes contra la humanidad fue liberado poco después y como los otros se trasladó a EE.UU. donde trabajó supuestamente el departamento de energía.
Theodor Benzinguer, estaba en la lista de criminales más buscados, pero su nombre fue tachado de la lista para ser incluido en Paperclip. Dirigía la Estación Experimental de la Fuerza Aérea de los nazis, donde se utilizaban como cobayas a seres humanos, donde murieron muchos de ellos como consecuencia de los crueles experimentos a que eran sometidos, pertenecía al grupo de científicos cercanos a Himmler y era su voz la que se escuchaba en los documentales que de tales experimentos se hacían para mostrarlos al monstruoso jefe de las SS. Pues bien, esta eminencia trabajó en los EE.UU hasta su muerte en 1999 y en su obituario el New York Times destacaba su gran labor al servicio de la Marina Estadounidense.
Kurd H. Debus, otro puntal importante de la carrera espacial de los EE.UU gracias a la Operación Paperclip, llegó a retirarse siendo director del Centro Espacial JFK, lo que no se cuenta es que era un autenticó nazi que fue miembro inicialmente de las SA y posteriormente oficial de las SS, hasta el final de la guerra.
Siegfried Knemeyer, consejero personal de Hermann Göring y jefe de proyectos de la Luftwaffe, terminó trabajando para la Fuerza Aérea de los EE.UU siendo condecorado por el Departamento de Defensa por sus servicios distinguidos.
Otros no pertenecieron oficialmente a la Operación Paperclip, pero puede que su sombra los cobijara, es el caso del Oficial japonés Shiro Ishii, máximo responsable en guerra bacteriológica de Japón y Jefe del Escuadrón 731, una unidad especial de guerra bacteriológica, que tuvo su sede en China, donde decenas de miles de prisioneros murieron bajo los brutales experimentos con todo tipo de agentes patógenos entre los que estaban la peste, el ántrax, el cólera y un largo etc., además de practicar vivisecciones, inducir abortos, ataques cerebrales y cardíacos etc.
Kurt H. Debus
Shiro Ishii
Pues con estos antecedentes consiguió la inmunidad, en su favor el informe del Dr. Edwin Hill, Jefe de Fort Detrick, donde estaba el departamento de guerra bacteriológica de EE.UU. En él se decía que la información aportada era absolutamente inestimable y que jamás podría haberse obtenido en los Estados Unidos debido a los escrúpulos respecto a experimentar con humanos y fue obtenida a muy bajo costo. El propio General MacArthur respaldó el trato con Ishii de inmunidad por información.
Tal es el secretismo que no se tiene claro qué pasó después, aunque algunas fuentes dicen que trabajó para los EE.UU en el desarrollo de armas bacteriológicas.
Por supuesto muchos científicos se negaron en redondo a trabajar con semejantes eminencias y otros se opusieron con todas sus fuerzas contra el proyecto Paperclip, como es el caso de Albert Einstein, pero los intereses ocultos prevalecieron.
Lo cual nos deja la siguiente pregunta, ¿tan importante era la información y el trabajo que los nazis habían desarrollado, para olvidar el criminal pasado de tantos de ellos, con todos los medios de occidente se necesitaban a estos individuos para desarrollar las nuevas tecnologías, de dónde procedían los conocimientos de estos científicos que los hacían imprescindibles? ¿En manos de quién estamos?
Imágenes cortesía de: youtube.com; en wikipedia.org; 20minutos.es; taringa.es
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