Que levante la mano quien no tenga un conflicto permanente con su baño por no tener donde guardar tanto potingue. Pues bien, hoy te traemos estrategias y sugerencias para organizar el baño de forma que, a partir de ahora, tu relación sea de puro amor —o como mínimo, mucho amor y una pizca de odio, porque seguro que una bañera exenta también te gustaría —.
Primero de todo, déjame ser clara y no andarme con paños calientes. ¿Estás seguro de que en tu baño solo guardas lo estrictamente necesario? Lo pregunto porque buscando opciones, he visto baños que tienen más almacenaje que una despensa y no puedo evitar preguntarme … pero ¿qué se guarda ahí? ¿ofertas del 3×2 de papel higiénico?
Mi primera recomendación para organizar el baño es que revises tus botes de manera objetiva y hagas una limpieza a la japonesa (y no, no me refiero al método KonMari, sino más bien al estilo huelga japonesa: tirar sin descanso, haciendo oídos sordos al yo-interior-fan-del-y-si… Así que nada de bandas de cera cuando ya te has hecho la láser, nada del rímel que usaste el día de tu graduación (siempre que te hayas graduado hace más de 6 meses, ¡claro!) y nada de botes y botes de fijador cuando ya has conocido formalmente a la inigualable e implacable Alopecia.
Recuerda … en un baño, el menos SIEMPRE es más
Si unos cajones bajo el lavabo no han acomodado a los supervivientes de la limpieza, lo ideal sería poder encontrar un hueco en el baño que te permita instalar un armario de suelo a techo. En sí, el tamaño del baño no es un impedimento para que tengas uno, ya que siempre hay espacio encima de una cisterna empotrada. Y de eso, mis queridos amigos, los aseos saben mucho.
¿Qué tal los de toda la vida? Yo acabo de rescatar uno de la última reforma en la que estoy trabajando y que, para mi fortuna, la dueña no supo apreciar su potencial
Con apenas un fondo de 15cm, estos, o sus herederos, son capaces de albergar todo lo que necesitas tener a mano para tu aseo y acicalamiento cotidianos. Lo más grande (toallas, papel o cachivaches eléctricos) puede alojarse en cestas colocadas debajo del lavabo, por ejemplo.
Vaya por delante que creo firmemente en los armarios cerrados para organizar el baño. Solo así conseguirás una grata sensación de limpieza y orden en un espacio tan limitado. Pero si ninguna de las opciones anteriores son factibles en tu baño o bien, si no puedes deshacerte de ese deseo irrefrenable de exponer tu Narciso Rodríguez, contempla la opción de unas estanterías abiertas.
Solo hay un lugar donde, en mi opinión, evitaría colocarlas: encima de los sanitarios sin cisterna empotrada. Ahora, no me preguntes el porqué, no sé explicarlo. Creo que lo veo visualmente ruidoso, pesado (echa un vistazo y me das tu opinión) Prueba en todo caso a ponerlas en un lateral (del lavabo, del inodoro …) si es posible. También te recomendaría que invirtieses en botes con buen diseño o te darás cuenta que tu estantería no está a la altura de las de Instagram.
Hay cosas que hacen falta donde hacen falta. El jabón en la ducha, el cepillo de dientes en el lavabo, la toalla bien a mano, etc. Si estás contemplando renovar tu baño, considera crear alguna hornacina en la ducha o al lado del lavabo. Quedan perfectamente integrados, siendo soluciones estéticas, limpias y funcionales.
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