Como me gustan los paños antiguos de hilo que he ido coleccionando a lo largo de los años. Algunos son comprados en muchos de nuestros viajes y otros, regalos de la mano de personas maravillosas. Hoy rescato unos cuantos para colarlos por esta ventana haber que os parecen. Pues eso chicas, jueves de paños de hilo delicados es lo toca hoy...
Esparcidos están por la mesa del salón...
Caminos de mesa alargados, paños más pequeños y otros cuantos enmarcados en cuadros de oro envejecido...
Éste por ejemplo lo compré en la preciosa isla de Fuerteventura...
Junto con el otro que se complementa...
Uno de mis preferidos está colocado en un sencillo marco antiguo, se vino conmigo desde otra de nuestras islas, Lanzarote y esta formado por círculos de hilo bordados a mano con muchísima paciencia...
Después están los regalados por mi madre y mi tía. Ellas los eligieron pensando en mi antes de casarme y yo ahora los guardo como auténticos tesoros...
Adquiridos en La Bisbal, un pueblo de Gerona en el que abundan las tiendas de cerámica y antiguedades...
El que asoma ahora mismo por aquí me lo hicieron a medida en una tienda de mi ciudad para colocarlo en mi primera mesa de comedor cuando me casé. Era totalmente rústica y el crudo con
borde de puntilla le quedaba genial...
Y que me decís de éste vergelianas. Blanco y bordado con flores en azul. Quien me lo regaló me dijo que era una toalla antigua de las que se usaban hace montones de años en los viejos palanganeros. Pues bien yo la coloco en el lavabo de arriba como tal cuando tengo invitados en casa y os confieso que llega a enamorar...
Y ahora viene mi genial idea para compartir con vosotras. Un mesa pequeña, una bandeja de madera oscura...Por cierto, mirad que panorama en casa mientras os lo muestro. Mis dos tesoros tirados a merced del aire acondicionado, todo un poema...
Lo que os decía. Una mesa, una bandeja...
Y uno de los paños de hilo...
Sobre él colocaré un cristal para que quede bien protegido, transparente por supuesto, para que se cuele por él tan preciosa tela bordada...
No queda nada mal, parece una mesita auxiliar combinada en dos tonos, blancas las torneadas patas y caoba el sobre que la complementa...
Os la acerco hasta la mismísima entrada, junto al mueble que me regaló mi madre hace tiempo...
Ambas se complementan perfectamente en los mismos colores...
Le coloco encima largas velas en turquesa para resaltar, macetas con pequeñas plantas y un portavelas de cristal...
Nueva manera de decorar la entrada de cualquier casa, sobre todo si el espacio es bastante reducido...
Sobre ella la percha de ganchos y flores a la que le cuelgan placas y corazones...
Fijaros lo fácil que es redecorar un pequeño rincón. Solo tenemos que rescatar objetos guardados y darle nuevos y diferentes usos...
Yo hoy aúno una bandeja barnizada, un paño antiguo, una pequeña mesita, velas, plantas, jarrones y portavelas...
Todo ello sencillo, pero repleto de personalidad...
Lo dejo todo a un lado para coger de nuevo mis paños enmarcados, arriba me los vuelvo a subir para ser colocados donde siempre han estado...
En la pared del rincón colonial que tanto os gusta a todas, haciendo compañía al mapa de Menorca que en su día nos trajimos de una de nuestras escapadas veraniegas. Pero que vacía y triste queda la pared sin mis preciosos paños de hilo...
Juevesssssssssssssssssssss, sin mercado de plantas en el que escoger preciosas variedades. A cambio os enseño a decorar la entrada de vuestras casas, se que muchas de vosotras estáis iniciando cambios en vuestros hogares y pequeñas ideas siempre vienen de maravilla...
¡Hasta mañana preciosas!