Llevo varios días en los que estoy pasando calor por las noches y solo pienso en cosas que me quiten este calor y me refresquen. Y la verdad no hay nada mejor como una buena piscina sinceramente. Da igual que sean bebidas refrescantes con mucho hielo o una ducha de agua fría, nada tiene más efecto y mejor rollito que una piscina. Las cosas como son, al cesar lo que es del cesar.
Para colocar este tipo de mini piscinas en nuestro patio o terrazas, tenemos que tener en cuenta que para esto el tamaño si que importa. Es más, es lo más importante a la hora de tener que invertir más o menos dinero. Yo por ejemplo soy mas partidario de una piscina pequeñita como la de la primera imagen aunque dispongamos de espacio para algo mayor, porque también prefiero tener espacio de patio o de terraza para hacer otras cosas (que el verano es muy largo). A parte como os comentaba antes, el factor económico también lo tendría en cuenta. Y para este último, también hay otro detalle que no se nos puede pasar. Una piscina a ras de suelo siempre nos va a costar más que una piscina elevada.
Yo era de los que pensaba que una piscina siempre tenía que esta a ras de suelo porque si no perdía gracia y como que era algo muy grande que rompía todo visualmente. Pero tengo que reconocer que a base de ver ejemplos en Internet me he dado cuenta que la opción de tener una piscina elevada puede ser algo genial para crear un espacio precioso en el patio, el jardín o la terraza. Se pueden combinar muy bien con plantas o con madera o se puede jugar mucho con los materiales de construcción como por ejemplo colocando alguna pared de vidrio, cosa que con las piscinas convencionales no se puede tanto.
Por precio, por estética y por las posibilidades, prefiero una piscina elevada frete a una convencional. Pero como para gustos los colores y muchos tendréis otra opinión al respecto, lo ejemplos de hoy son variados. Lo importante que es que elijamos bien lo que queremos y sobre todo, disfrutemos al máximo de ello. ¡Ciao!