Los porcelanatos son perfectos para aquellas personas que necesitan pisos “para toda la vida”. Resisten al paso del tiempo, se adaptan a las distintas tendencias y son accesibles. Además, en los últimos años, los fabricantes fueron modernizándose e incorporando distintas tecnologías, que son capaces de crear distintos modelos de porcelanatos. De esta forma, se logra que puedan ser utilizados en todos los ambientes de una casa.
Los porcelanatos están hechos de una arcilla refinada y purificada, agua, cuarzo y sílice. Estos últimos le otorgan brillo y dureza. En su proceso de fabricación, se cuecen a una alta temperatura y presión, para lograr que sean más resistentes. Al poseer baja absorción de humedad, agua, fuego y golpes fuertes, son ideales para baños y exteriores.
Se pueden conseguir en distintos tamaños, lo que los convierte en una buena opción para ambientes amplios. A su vez, son fáciles de colocar y no necesitan un sellado especial que los proteja.
Tipos de porcelanatos
Existen distintos tipos de porcelanatos. Cada uno se adapta a los diferentes pisos que puede haber en una casa:Esmaltado:
Este tipo de porcelanato se considera uno de los productos que reúnen los estándares técnicos más altos del mercado. En su producción es recubierto con un esmalte a base de silicio que logra ese efecto de “barnizado”. De todas maneras, es posible encontrarlos con brillo, sin brillo o color mate. Son ideales para livings y comedores, aunque también pueden quedar muy bien en cocinas.
Natural o mate:
A ser de un material muy resistente y poco resbaladizo, es perfecto para exteriores o lugares comerciales, aunque su aspecto puede crear ambientes muy acogedores.
Rústico o semi rústico:
Quienes deseen colocar porcelanatos en exteriores, este es el tipo indicado. Son muy buenos para revestir espacios expuestos al contacto directo con la naturaleza, como jardines, terrazas, paredes exteriores y piletas.
Satinado:
Tiene un acabado con menos brillo, es sedoso,muy resistente y fácil de limpiar. Su opacidad logra que los ambientes sean más acogedores, por lo que son muy utilizados en salas de estar, comedores y habitaciones.
Pulido:
Es de tipo liso y tiene una capa protectora con brillo de espejo, a diferencia de otro tipo de porcelanato. Es ideal para ambientes secos, como livings, comedores, escritorios y salas de estar.
Pulido rectificado:
Este tipo de porcelanato se distingue por sus baldosas de diseño, con dibujos y colores, muy modernos. Son perfectos para habitaciones de los más chicos o para resaltar un ambiente en particular.
Imitación piedra o madera:
Gracias a la tecnología, hoy en día es posible contar con este tipo de piso que genera la misma calidez que la piedra o la madera. Quedan muy bien en monoambientes, en habitaciones, livings y hasta en baños.
Sin duda, los beneficios de los pisos de porcelanato son muchos. Para las casas o espacios en los que circulan varias personas son la mejor alternativa, ya que son fáciles de limpiar. Si se vuelca algún líquido solo hay que pasarle agua, pero con barrer, pasar la aspiradora y pasar un trapo una vez por semana, alcanza. Lo que hay que evitar: abrasivos, como la lana y el acero.