Reformas: zonas de la casa que las pueden necesitar e ideas para llevarlas a cabo

Comprar una casa propia es uno de los sueños comunes de muchas personas. Crecer, encontrar un trabajo y una estabilidad económica que te permita acceder a una vivienda en propiedad es una de las cosas más satisfactorias y tranquilizadoras del ciclo vital dentro de nuestra sociedad. Especialmente en estos momentos donde el alquiler se presenta como una alternativa a la emancipación con precios inasumibles, poder encontrar una vivienda que podamos llamar nuestra y convertirla en nuestro hogar, es sin duda un motivo para estar satisfechos, orgullosos y alegres a partes iguales.

Por eso podemos pensar que cuidaremos en la medida de lo posible cada detalle para que el inmueble y sus estancias se conviertan poco a poco en ese lugar que siempre habíamos soñado para vivir. Sin embargo, el paso del tiempo trae consigo desperfectos inevitables que pueden alterar esa armonía que poco a poco hemos conseguido durante nuestra vida. También puede ocurrir que nuestras necesidades vitales hayan cambiado y sea necesaria una reestructuración del espacio. Sea como sea, las viviendas pueden necesitar en algún momento una reforma que vuelva a devolverles su luz primera.

Hoy, en este artículo, hablaremos de las estancias de la casa donde las reformas son más habituales y algunas ideas para que el entorno vuelva a lucir como en los primeros días.

Reformas en la cocina

La cocina es una de las estancias de una vivienda que más tienden a ser reformadas. El motivo principal es el deterioro del entorno, especialmente del mobiliario, que debe ser renovado pasados, aproximadamente, unos 25-30 años si no hay ningún otro problema. Otra de las razones que motivan una reforma en la cocina puede ser la estética o la funcionalidad, ya que las exigencias de los habitantes sobre los espacios pueden cambiar con el paso de los años. Llegado el momento, debemos plantearnos la renovación de mobiliario y electrodomésticos que se adapten al nuevo formato, así como el uso de nuevos materiales.

El microcemento o el hormigón impreso son tendencia en estos momentos para zonas como la cocina. En cuanto a la estructura, abrir la estancia al salón para crear un espacio común está a la orden del día, creando con ello una sensación diáfana.

Un elemento fundamental para hacer efectiva la reforma son las puertas, que deben ser restauradas o renovadas. En el caso de las cocinas, algunas ramas del interiorismo apuestan por una separación simbólica en las cocinas abiertas al comedor. La tendencia en puertas rústicas de granero cobra cada vez más importancia en estos diseños con su sistema de rieles correderos. También para despensas o conexión con la terraza exterior suelen funcionar realmente bien.

Reformas en el baño

Como la cocina, el cuarto de baño es una de las estancias más sufridas de la vivienda. El uso del agua en la ducha, el wáter y el lavabo suele generar una concentración de humedad sustancialmente mayor que en el resto de la casa. Por esta razón, la decoración de las paredes, el suelo o el mobiliario auxiliar pueden sufrir un deterioro más rápido y acusado.

También puede pasar que el diseño primitivo contara con bañera y queramos hacer el cambio al plato de ducha o a las duchas a ras de suelo. Asimismo puede que un cambio de tuberías o una renovación del conjunto de grifería sean necesarias.

Las tendencias modernas en la reforma de baños apuesta por materiales como el azulejo raso y el microcemento. Especialmente el segundo ofrece opciones muy diversas, ya que con él podremos confeccionar igualmente nuestro suelo y paredes que una estantería o soporte para el lavabo.

Reformas en el salón

Sin duda es uno de los espacios de la casa con más uso, especialmente cuando se trata de descansar y desconectar de la rutina. Por esa razón, intentamos que esté siempre lo más arreglado posible, sin perder ese encanto y esa armonía que hacen de esta estancia un lugar especial de la casa. Los cambios de tendencia estética suelen ser la razón más habitual para acometer una reforma en esta zona, incluyendo en ocasiones incluso un cambio de distribución en cuanto a su estructura.

Siempre podemos ganarle algún metro a costa de otra zona menos útil de la casa, o podemos reservar un rincón para un pequeño despacho donde trabajar a gusto y sin molestias.

La renovación del mobiliario suele ser fundamental para lograr el efecto que deseamos con el cambio. Estanterías y repisas de nuevo diseño y un sofá de alguno de los estilos más actuales pueden ser las claves.

La estética rústica en un espacio diáfano combinada con el uso de maderas nobles funciona bien en muchos casos, aunque tendremos que revisar si casa con el conjunto del resto de la casa. La decoración minimalista de las paredes y los tonos claros son tendencias que no pasan de moda, por lo que nos ayudarán a conseguir el resultado final esperado de la reforma.