El propietario de este estudio decidió transformarlo en un apartamento de un dormitorio doble completo, cocina y salón independientes, baño, espacio de almacenaje y una pequeña zona de estudio. Como veis, el estudio no contaba con cocina ni armariada:
Planos de planta antes y después de la reforma
Se trataba de un espacio muy estrecho y alargado, así que a la hora de diseñar la nueva distribución, y con el fin de aprovecharlo al máximo, condensaron todo el programa funcional y de almacenaje en un cubo central, que serviría además para articular las circulaciones de la vivienda:
Esta solución divide el apartamento en cuatro zonas perfectamente diferenciadas: el dormitorio, la zona de aseo y almacenaje, el salón y la cocina. El unificar el suelo en las cuatro zonas hace que cada una parezca más grande de lo que es, dando continuidad al espacio:
Además, se añadieron puertas correderas formando parte del cubo central para separar espacios, que permiten al propietario tener la intimidad deseada en función del momento del día que se trate, manteniéndolas abiertas o cerradas según sus necesidades:
No se desaprovecha el espacio en ningún momento, incorporando los armarios y estanterías empotradas al diseño de ese cubo central que articula la vivienda:
Al igual que con el suelo, se unifican también los revestimientos de la vivienda, con acabado blanco brillante, que aporta luminosidad y amplitud al espacio:
Así que como veis, con un poco de ingenio e imaginación, se puede vivir en un espacio tan pequeño como este, y que ademas resulte innovador y elegante! ¿Y a vosotros qué os parece?
Via : sfaro
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