Pues además de que es una inmensa mansión, su restauración ha sido realizada con el total cariño de sus dueños. Dicen que después de vivir en nueve casas cuando descubrieron esta, sabían que iba a ser la definitiva y por ello se volcaron de lleno en acomodar esta vieja granja para convertirla en su nuevo hogar.
Un casa de granjeros en la que no podía faltar una gran cocina eso si, bien distribuida y a la que no le falta ni un detalle. Comenzando por aquí y siguiendo el recorrido por el resto de la casa se puede decir que es casi una casa de las que sólo se ven en las películas.
Una mezcla entre el estilo cottage y un toque shabby que la llevan a parecer a una auténtica casa de muñecas. Mucho mueble reclicado con el que se consigue un aire vintage muy cálido y algunos toques de color para romper la monotonía. A ver que os parece porque resulta tan curiosa como atractiva.
Magnolia Homes