Si eres fan absoluto del blanco y te gustan los ambientes total white, seguro que la mayoría de los espacios de tu casa están decorados en este luminoso y brillante color. Y, aunque limpios y radiantes, a veces los espacios blancos pecan de fríos, en especial si son muy modernos y minimalistas. Hoy te traemos algunas ideas geniales para aportar calidez a una cocina blanca.
El blanco es un color genial para cocinas. Resulta limpio, actual, ligero y brillante, todas estas cualidades realmente valoradas en un espacio de este tipo. Sin embargo, y sobre todo en ambiente de estilo minimalista, puede resultar frío e impersonal. Aquí tienes algunas claves para aportar calidez a una cocina blanca y triunfar.
A pesar de que le color blanco es atemporal y muy elegante, en algunas ocasiones puede quedarse un tanto despersonalizado. En cualquier caso, esto no es un problema. O no debería de serlo, ya que hay muchas formas de conseguir que sea más cálido y acogedor. No tienes por qué renunciar a las muchas ventajas que te ofrece el blanco, basta con que lo caldees un poquito. ¿No sabes cómo? Nosotros te lo explicamos.
Dale calidez a una cocina blanca con un suelo de madera
Pocos materiales resultan más naturales y cálidos que la madera. No solo es perfecta en muebles y objetos, sino también en revestimientos y superficies en cualquier espacio de la casa. Su tacto suave y su variedad de colores procedentes de la naturaleza, la convierten en el material estrella en cualquier estancia de la casa, incluida la cocina.
Y es que una forma de añadir un toque cálido a una cocina blanca es instalando un suelo de madera. Puede que no te parezca buena idea o que, incluso, te asuste. Sin embargo, no tienes nada que temer. Hoy en día hay revestimientos de madera capaces de soportar sin problemas la humedad que pueda haber en una cocina.
Un suelo de madera bien instalado puede soportar un uso normal de la zona de aguas, con alguna salpicadura y el uso de la fregona. Aunque para estos casos y emplazamientos, conviene elegir suelos laminados con protección antihumedad. O, incluso, un revestimiento cerámico (o también un suelo vinílico) que imite la madera. Ambos materiales logran el aspecto visual de la madera de forma asombrosa.
Mezcla de texturas
Una forma efectiva de crear interés visual en un espacio monocromático es incluir diferentes materiales y texturas. De esta manera, el ambiente no queda demasiado homogéneo y se introducen esquemas y patrones diferentes.
Pero, ¿cómo lograrlo en una cocina total white? Es posible si combinas materiales en las diferentes superficies creando, por ejemplo, una pared de azulejos de tipo metro, o con un patrón, forma o acabado diferente.
Las encimeras son también un recurso con el que jugar. Pueden ser blancas, pero hay muchas texturas diferentes: piedra o material compacto, etc.
Iluminación cálida
Ya sabes que la iluminación es una manera importantísima de crear ambiente en una casa, sea cual sea la habitación en cuestión y, por tanto, también en la cocina. En este espacio tendemos a colocar luces demasiado frías que no ayudan a la hora de crear un ambiente acogedor.
Por eso, si quieres aportar calidez a una cocina un tanto fría, debes elegir luces cálidas de color neutro (mejor que blanca). Y también has de ocuparte de que no falte la luz. Apuesta por una iluminación abundante, con lámparas de techo que proporcionen luz general, y sistemas para iluminar las zonas de trabajo o de comedor.
Los accesorios también importan
Y no me refiero al menaje de cocina, ni a la vajilla. Estoy hablando de accesorios no tan efímeros como los platos o los cubiertos. Me refiero a cosas como los tiradores o las griferías.
En lo que se refiere a los tiradores de los armarios de la cocina, ni te imaginas lo mucho que puede cambiar el ambiente general del espacio, sustituyendo únicamente estos accesorios. Una idea para aportar calidez a una cocina blanca es colocar unos tiradores dorados de latón. Además de ser más acogedor, el ambiente ganará en elegancia.
Los grifos de fregadero también nos brindan una oportunidad de añadir un toque cálido. Para conseguirlo, elige griferías doradas de color bronce, mate o brillo, en lugar del habitual acero inoxidable.
Un toque de flores frescas
Este último detalle no deja de ser efímero pero efectivo. Un bonito ramo de flores frescas de un color intenso y especial ayuda a poner un toque cálido y natural en cualquier rincón de la casa. Y la cocina no es una excepción. Si te preocupas de que las flores sean un elemento habitual en tu cocina, esta nunca será un espacio frío e impersonal.
Como ves, hacer de la cocina, por muy blanca, minimalista y moderna que esta sea, el lugar más acogedor de tu casa es posible.
Puedes leer la entrada original y completa en de la revista online Decoración 2.0.