en el reto decorativo de facilisimo.com del mes de marzo sobre las cocinas.
Siempre hablamos de la importancia de decorar un espacio,
sobre todo si el mismo es de un reducido tamaño, o estrecho; pero,..
¿Y la pintura?
El color es igual e incluso más importante ya que influye muchísimo en el espacio.
Empleado una paleta de colores adecuada,
se puede ampliar la sensación de espacio,
ya que hay gamas cromáticas que dan una mayor sensación de amplitud.
Cosas a tener en cuenta...
1. El colorLos colores que debemos evitar son los tonos oscuros.
Los mejores colores para pintar las cocinas pequeñas, son sin duda los claros, estos aportan luminosidad, reflejan la luz, dan mayor sensación de amplitud al espacio. En este sentido, el mejor color es el blanco, pero se puede combinar con otros colores que añadan a la estancia una mayor profundidad, para ello, los mejores tonos son los verdes, azules y violetas y toda su paleta de colores. Estos colores hacen que las paredes retrocedan visualmente.
También puede utilizar varios tonos de blanco y combinar texturas que contrasten. Un techo blanco o crema dará inmediatamente más altura a la cocina.
El color amarillo también potencia la entrada de luz en un ambiente.
Aunque los colores oscuros no son adecuados para cocinas pequeñas, esto no significa que no podamos emplearlos en la decoración de las mismas. Por ejemplo, para combinar el negro y el blanco, las paredes como las encimeras y el suelo se colocan en blanco y las puertas de los muebles en negro. El color de tono oscuro solo se utilizará en muebles o electrodomésticos.
2. La cocina según el Feng Shui
Otros de los colores que se emplean para crear una mayor sensación de profundidad en las cocinas pequeñas, son las paletas naturales: colores tierras, tanto verdes como marrones, así como los beige, madera y los colores crema.
La cocina se relaciona en el Feng Shui con el elemento madera. Por ello, se puede adornar fácilmente con hortalizas y frutas, como boles de fruta fresca, bandejas de frutos secos y panes, tallos de hierbas o jarrones con flores; y pintar con los colores mencionados.
3. Combinar con muebles y objetos
Tenemos que prestar atención también a los objetos decorativos, y como no, a los azulejos. Estos últimos son muy importante y no debemos descuidar su elección. Yo siempre recomiendo optar por colores claros, blanco a ser posible, por limpieza y luminosidad.
En cuanto a los muebles decántete por líneas rectas. No elijas muebles de grandes dimensiones, sino se comerán todo el espacio. Elige muebles versátiles, de doble función: como mesas plegables o abatibles,
Aparte de estos pequeños trucos también juega un papel fundamental:
El tipo de cortina que coloques en las ventanas de la cocina.
Usa tejidos livianos, ligeros y traslúcidos en colores claros para dejar pasar la luz natural. Si la ventana es pequeña puedes elegir una cortina o estor con un estampado a rayas horizontales para que la ventana parezca más ancha.
El tipo de suelo.
Preferiblemente uniforme.
La entrada de luz natural y sus trucos para conseguir una mayor iluminación.
Mucha luz natural agranda cualquier espacio. Maximice la luz y evite sombras que hacen que la habitación se vea más pequeña. Combínala con luz artificial.
Decorar con espejos o cristales.
Necesitamos engañar al ojo y cerebro para que nuestra cocina parezca mayor de lo que es. Una forma de hacer esto es reemplazar las puertas de algunos muebles por frentes de vidrio. Esto hace que el ojo pase a ver la profundidad del mismo, por lo que la pared se siente más lejos. Eso sí, debemos mantener los artículos dentro ordenados y coordinados según el color.
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