Hoy os quiero enseñar este casoplon que me he encontrado leyendo el magazine de The Times (ayyyy que pedante acabo de sonar ¡por Dios!).
Llena de color, y manteniendo en sus paredes y en algunos complementos la grandiosidad de una antigua casa georgiana, que además perteneció a la madre de Óscar Wilde, ¡a mi me ha conquistado!
Además está al lado de St Stephen’s Green, el único parque del mundo donde he disfrutado de un buen libro o de mirar a los patos (en general no soy una persona de parques).
La vemos y ahora ¡seguimos comentando!
Los cuadros enormes que visten las paredes, los textiles estilo nórdico, las flores frescas… Todo es genial y muy muy apropiado para iluminar la oscura Dublín. Aunque lo mejor es el papel pintado del despacho. ¡Lo quiero y punto!
En fin, ya me diréis que os gusta más de la casa, yo os dejo para regocijarme en un ataque de “morriña irish” que me acaba de dar. No se que me pasa pero últimamente extraño Irlanda especialmente, ya os lo había dicho, ¿no? … Quizás solo sea por qué hace 3 semanas que sudo día y noche y eso allí ¡no me pasaría! O quizás es que en cada sitio que uno vive deja un trocito de si, y se lleva un montón de recuerdos, que a la larga siempre son buenos…
O seguramente solo es que estoy ¡premenstrual!
Muchos besos!
Mrs. Shabby
y ahora… ¡SI ME QUERÉIS, SEGUIDME!