Se encuentra en Australia y lo que más me gusta de ella son los encantadores detalles que en conjunto, forman la esencia de una casa de playa: decoración de colores alegres, luz a raudales, muebles sencillos que armonizan las habitaciones, complementos en mimbre, alfombras de fibras vegetales y mucho espacio, estancias holgadas y continuas donde la brisa del cercano mar fluye a su antojo. Destaco el interesante detalle de la imagen de abajo: bolsos de paja para decorar la pared como si de cuadros se tratara, original idea que nos permite reciclar y mostrar en un lugar destacado algo que no usamos.
En toda la casa se entremezclan estilos, vintage, rústico y contemporáneo, algo que unido le otorga magia. El entremezclar estilos es un recurrido recurso a la hora de decorar espacios, tradición y modernidad se fusionan para crear espacios hechizantes.
No podía acabar el post sin mencionar la impresionante piscina infinity y el paisaje que se ve a través de sus barandillas de cristal. Enclavada en una escarpada colina, las vistas del océano completan una casa de vacaciones perfecta.
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Palm Beach Tower, publicado con permiso de Desire to inspire