La primera vez que ví el vinilo en pared fue en casa de mi amiga Carol. Puso unos detalles muy bonitos en la pared de la cocina y le daba un aspecto muy jovial e informal. Poco después una compañera de trabajo me comentó que tenía que cambiarse la cocina, pero que al final, para ahorrar dinero, había forrado los armarios de la cocina con vinilo, lo que hizo que su cocina pareciera nueva, totalmente diferente. Aluciné al ver las fotos, si no me hubiera dicho nada del vinilo hubiera creído que eran armarios nuevos.
Cuando me independicé me puse a investigar como loca todo lo que se puede hacer con vinilo, y descubrí muchísimas cosas muy interesantes. Existe vinilo que imita al parquet, pero mucho más económico claro. Encontré más fotos de muebles de cocina forrados con vinilo y es sorprendente como hace cambiar todo el aspecto de la cocina..
Yo siempre he querido tener una pared de ladrillo, blanca o marrón clarito, me gusta ese toque rústico y hogareño que aporta a la pared. Pero encontrar un piso con una pared de obra vista no es muy habitual, además colocar ladrillo directamente acaba saliendo caro, pero tenemos la opción de colocar vinilo con forma de ladrillo. No deja de ser un rollo como de papel, pero el material del que está hecho es más resistente que el papel, por lo que lo hace más fácil incluso para limpiarlo. En Youtube hay tutoriales de cómo se aplica y coloca, y es muy fácil.
Si estáis pensando en cómo podéis darle un nuevo toque a esa pared de vuestro dormitorio, o aprovechar algún pilar que tengáis en el salón y convertirla en una columna de ladrillo, o incluso os gustaría cambiar los muebles de la cocina pero no os lo podéis permitir echar un vistazo por Internet, encontraréis ideas muy curiosas y seguro que os sorprenden.
Besos, Marta
Fuente: este post proviene de El Círculo Polar, donde puedes consultar el contenido original.
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