Matizan la luz que entra del exterior, nos ayudan a preservar nuestra intimidad y ocultan las vistas cuando estas no resultan atractivas… Cortinas, visillos, estores y paneles japoneses son solo algunas de las muchas alternativas para vestir las ventanas de nuestro hogar.
Entre tantas alternativas ¿cuál es la mas adecuada? Sentimos decirte que no hay una única respuesta correcta. Cortinas y visillos siguen representando la alternativa mas clásica y la mas popular. Utilizadas conjuntamente nos proporcionan un gran abanico de posibilidades. Pero antes de meternos en faena, ¿conoces la diferencia entre una y otra? ¿sabes qué es un visillo?
¿Qué es un visillo?
Comencemos por el principio, ¿qué es un visillo? Algunas de las definiciones que hemos recogido y que os ayudarán a entender mejor de que hablamos son las siguientes:“Cortina pequeña que se coloca en la parte interior de los cristales para resguardarse del sol o impedir la vista desde fuera”
“Cortinilla fina y casi transparente que se coloca en la parte interior de las ventanas” Espasa-Calpe 2005
De estas definiciones podemos deducir que un visillo es en definitiva una cortina que permite el paso de la luz de forma velada e impide una vista parcial del interior desde fuera. Con el fin de cumplir con ambas características se confeccionan en tejidos ligeros y casi transparentes, principalmente en hilo o lino.
¿Cómo se colocan?
Los visillos pueden colocarse en las ventanas de diferentes formas, mediante barras, portavisillos o rieles. Cada una de ellas te permitirá, a su vez, jugar con diferentes formas de colgar los visillos y diferentes estéticas. A grandes rasgos estas son las posibilidades:Barra
La barra es probablemente el soporte mas popular para las cortinas. Existen barras de diferentes materiales (de madera, de forja, de acero, etc.) y con distintos acabados (pintadas, con brillo, en acabado mate, con efecto envejecido, etc.), por lo que las alternativas son infinitas.Las cortinas y los visillos pueden unirse a estas barras utilizando sistemas diferentes. Las arandelas o anillas, que actúan insertadas en una barra sobre la que corren, representan la forma mas tradicional de hacerlo. Pero también puede realizarse esta unión mediante ojales realizados en la misma cortina o trabillas. una idea muy decorativa que consiste es rematar la parte superior de las cortinas con tiras anchas de la misma tela por las que luego se pasa la barra.
Portavisillos
Los portavisillos han sido especialmente diseñados para que puedas colocar tú mismo de forma rápida y sencilla los visillos en tu hogar. Mas finos que una barra se sujetan a la pared con distintos sistemas: a presión o atornillados. Aquellos con diseño extensible además son fáciles de adaptar a cualquier ventana.Una jareta, un dobladillo del ancho del portavisillos que se realiza en la parte superior de la tela, sirve generalmente para introducir esta en el portavisillos y quedar así fijada al mismo. Encontrarás portavisillos de distintos materiales (plástico, madera o metal) de forma que no te resultará difícil combinar de forma coherente ambos elementos.
Riel
Los rieles son guías metálicas que pueden fijarse al techo o a la pared, en cuyo interior se esconden unas pequeñas piezas a las que se sujeta la cortina mediante unos ganchos. Los rieles disponen de rodamientos que son los que permiten la apertura lateral o central de la cortina, al tirar de un cordón o una varilla.Comprobarás que algunos rieles incorporan una cinta de velcro en la parte superior. ¿Con qué fin? Con el de colocar un bandó, una pieza de tela horizontal que te permitirá ocultar el riel de la vista. Aunque no es este el único modo de ocultar el riel como habrás podido observar en las imágenes.
Visillos y cortinas, un gran tándem
Los visillos se colocan a menudo combinados con cortinas con el fin de lograr una mayor intimidad o ausencia de luz. En estos casos es frecuente escoger visillos muy ligeros y de color blanco. Visillos que contrasten con las cortinas que serán las que aporten cuerpo y color a la habitación.Colores neutros, así como azules y rosas muy suaves son los favoritos para decorar habitaciones contemporáneas y atemporales. Las tonalidades mas intensas se reservan para decorar dormitorios infantiles o habitaciones en las que se desea llamar la atención sobre la altura de los techos o una determinada pared.
Cuando queramos que la luz entre en nuestro hogar y no nos preocupen las miradas indiscretas abriremos visillos y cortinas de par en par. Si deseamos matizar el nivel de luz y ganar privacidad, bastará con cerrar los visillos manteniendo las cortinas abiertas y/o recogidas en los laterales. ¿Y si deseamos que la luz no nos moleste para ver la televisión o descansar? Entonces tendremos que cerrar ambos.
Combinar cortinas y visillos es una gran opción; nos ayuda a conseguir mas matices. Sin embargo, en muchos hogares los visillos pueden bastar para lograr un ambiente cálido y acogedor.