ASÍ ERA ANTES
DESPUÉS
Lo primero fue eliminar la madera, tenía mucho peso visual y hacía la estancia más pequeña y mucho más oscura de lo que realmente es. El resultado es un recibidor totalmente nuevo, lleno de luz y con un estilo sobrio, actualizado y muchísimo más práctico.
La decoración paso a ser sencilla, con tonos neutros y los toques justos de detalles como las flores naturales y los percheros, que siempre hacen falta en estos espacios. Un conjunto armónico y lleno de estilo que no se parece en nada al recibidor de madera y recargado que tenían antes.
¿Qué os ha parecido el cambio de este recibidor?
¡Que paséis un buen día!
três
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