Es una cuestión de mezcla de texturas, de espacios amplios sin recargar, con una base fría de piedra o cemento pulido que aporta pureza de lineas, con el toque orgánico de la madera en pinceladas muy pequeñas, lo justo para dar ese aire rústico y acogedor.
Son baños donde el continente es más importante que el contenido, donde éste sólo aporta ese detalle de diferenciación con una grifería moderna, unos toalleros hechos con unas simples ramas, un tronco a modo de asiento o unas pilas de piedra como lavabos.
¿Qué te parece? ¿Te gusta este estilo de baños?
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